header print

Guía De Crianza: Cómo Lidiar Con Niños Testarudos

El Redactor: Jessica Q. R.


Si escuchas con más frecuencia la palabra "no" de boca de tu pequeño, descubres que se niega constantemente a hacer cosas básicas como irse a dormir a tiempo, cenar o ducharse, y sientes que tu casa se ha convertido en un campo de batalla entre tú y él, podrías decir que tu hijo se ha vuelto bastante testarudo. Pero no te preocupes, estás en buena compañía: muchos padres tienen que lidiar con la terquedad de sus hijos, un rasgo que aparece en varias etapas de su desarrollo.

Sin embargo, debes saber que si adoptas la actitud adecuada, lidiar con un niño testarudo puede ser más sencillo de lo que crees. Para ayudarte a entender cómo hacerlo, te explicaremos brevemente qué caracteriza a los niños testarudos y por qué se vuelven testarudos, y te proporcionaremos seis consejos útiles que te ayudarán a devolver a tu hijo al camino de la escucha, la cooperación y la ayuda.

Cómo Lidiar Con Niños Testarudos

¿Qué caracteriza a los niños testarudos y por qué se vuelven testarudos en primer lugar?

Es importante entender que no todos los niños que expresan su deseo de independencia son considerados testarudos. Es importante determinar si tu hijo es realmente testarudo o quizás simplemente decidido, y sólo entonces actuar. Los niños testarudos se caracterizan por una gran inteligencia y creatividad, hacen muchas preguntas, de modo que al final pueden abrir la puerta a la rebelión; tienen sus propias posiciones y son "personas de acción". Los niños testarudos buscan regularmente ser escuchados y llamar la atención de su entorno, muestran una independencia extra, están decididos a hacer lo que aman y tienen claras habilidades de liderazgo, lo que también puede hacerlos parecer dominantes de vez en cuando. Muchos niños experimentan rabietas, pero en los más testarudos, pueden estallar con bastante frecuencia.

Los niños testarudos también se caracterizan por un pensamiento rígido: en realidad se niegan a cambiar la forma en que piensan, se comportan o actúan, incluso cuando se enfrentan a presiones externas. Si bien en la infancia este rasgo presenta serias dificultades para los padres, debes saber que realmente puede rendir frutos y ser beneficioso en la edad adulta, ya que en varios estudios se ha descubierto que los niños que tienden a rechazar reglas y normas en su juventud crecen para ser adultos destacados y de alto rendimiento tanto en la educación como en sus carreras profesionales.

Cómo Lidiar Con Niños Testarudos

6 maneras de lidiar con niños testarudos

1. Escucha, no discutas

La comunicación es una calle de doble sentido: si quieres que tu hijo te escuche, primero debes escucharlo a él; un niño decidido suele tener posiciones firmes y puede ser discutidor: si siente que su voz no es escuchada, su tono puede volverse desafiante e irrespetuoso. La mayoría de las veces, cuando tu hijo insiste en hacer algo que le pediste que no hiciera, o lo contrario, escuchar y hablar sobre lo que le molesta puede aliviar la tensión y ayudarte a persuadirlo para que actúe de la manera que quieres que lo haga. Entonces, ¿cómo enseñarle a un niño testarudo de cinco años a escucharte? Déjales que tomen la iniciativa, dales espacio para que se expresen de forma tranquila y práctica, y no intentes enfrentarte a ellos.

2. Comunícate con ellos, no los obligues

Cuando los niños se ven obligados a hacer algo en contra de su voluntad, tienden, por su propia naturaleza, a rebelarse y hacer todo lo posible por desobedecer. El término que mejor describe este comportamiento es "contra-voluntad": un concepto tomado de la psicología, que significa impulso instintivo de resistir cualquier sensación de coerción o restricción. Esto es característico no solo de los niños sino de las personas en general, especialmente de aquellas que son testarudas. Para superar esto, necesitas comunicarte con tus hijos y no forzarlos; por ejemplo, si tu hijo insiste en ver la televisión incluso después de la hora de dormir, no intentes obligarlo a dejar de verla.

En lugar de eso, siéntate con ellos y demuéstrales que te interesa lo que están viendo. Cuanto más interés, preocupación y comunicación abierta muestres, más dispuestos estarán a acudir a ti. Al final, cuando los niños se comunican bien con sus padres, lo más probable es que estén interesados ​​en cooperar.

Cómo Lidiar Con Niños Testarudos

3. Dales opciones

Aunque siempre parezcan pequeños y relativamente nuevos en el mundo, conviene saber que los niños desarrollan muy rápido sus propias actitudes y opiniones, y como seguro que ya te habrás dado cuenta, no les gusta mucho que les digan lo que tienen que hacer. Por eso, cuando quieras que tu hijo terco haga algo, es importante que le des opciones y no sólo instrucciones explícitas; si, por ejemplo, se niega a irse a la cama, en lugar de darle órdenes e intentar que no le quede otra opción, ofrécele algo que le dé la posibilidad de elegir en ese asunto, como por ejemplo: “¿Qué cuento quieres que te lea antes de irte a dormir?” – es probable que en apenas unos momentos lo veas arropado en la cama esperando escuchar ese cuento que ha elegido.

Sin embargo, debes saber que dar demasiadas opciones a un niño tampoco es bueno; si, por ejemplo, le pides que elija una prenda de todo su armario, esta es una elección que puede dejarlo confundido y dificultarle la decisión. Puedes evitar este problema si limitas su elección a solo 2 o 3 opciones.

4. Mantén la calma

Aunque discutir con un niño terco puede ser muy irritante y exasperante, regañarlo, gritarle y levantar la voz para superar su desobediencia puede empeorar la situación. Una vez que levantes el tono, tu hijo puede verlo como una invitación a una guerra verbal, y todo puede escalar hasta convertirse en una pelea a gritos inútil. Como eres el adulto en la foto, es tu responsabilidad llevar la conversación a lugares prácticos y encontrar soluciones, en lugar de perder los estribos. Para ello, antes o después de la conversación, haz todo lo que puedas para mantener la calma; haz ejercicios de respiración, ejercicio o escucha música relajante en casa, para que tu hijo pueda escucharte y calmarse contigo.

Cómo Lidiar Con Niños Testarudos

5. Respétalos

Si quieres que tus hijos te respeten a ti y a tus decisiones, tienes que respetarlos a ellos también; tu hijo no aceptará tu autoridad si se la impones. A continuación, se ofrecen algunos ejemplos de cómo puedes dar y recibir respeto en tu relación:

  • Busca la cooperación, no el seguimiento de instrucciones.
  • Establece reglas y límites para todos tus hijos y no seas negligente a la hora de aplicarlos solo porque te conviene.
    Identifícate con tu hijo y nunca rechaces sus sentimientos o ideas, ni los subestimes.
  • Deja que tu hijo haga lo que pueda por sí mismo y lucha contra el impulso de hacerlo todo por él; además, asegúrate de decirle que confías en él.
  • Predica con el ejemplo: este es el mantra que debes repetirte a ti mismo y poner en práctica.

6. Negocia

Si bien la negociación es un concepto que parece algo que solo se llevaría a cabo en los negocios o la política, a veces también es necesario cuando se trata con niños tercos. Los niños tienden a comportarse negativamente cuando no obtienen lo que quieren, por lo que, cuando quieras que tu hijo te escuche, debes comprender qué es lo que le impide hacerlo.

Sigue estos pasos:
Comienza por hacerles preguntas como: “¿Qué te preocupa?”, “¿Hay algo que te moleste?”, “¿Quieres algo?”. Todo esto les indica que respetas sus sentimientos y deseos y que quieres tenerlos en cuenta.
A partir de aquí, puedes avanzar para hablar y negociar con ellos. Por supuesto, eso no significa que tengas que ceder a todas sus demandas, pero debes ser considerado y práctico.

Regístrate gratis
Qué quisiste decir:
Al hacer clic en "Unirse", acepta nuestros Términos y Política de privacidad
Regístrate gratis
Qué quisiste decir:
Al hacer clic en "Unirse", acepta nuestros Términos y Política de privacidad