Construye tu confianza en ti mismo: Aunque la confianza no es lo único, es definitivamente una pieza importante para sentirte bien contigo mismo. No es algo que puedas construir de la noche a la mañana, pero te irás sintiendo todos los días un poco mejor contigo mismo. Toma un lenguaje corporal confidente, párate derecho, no te encorves, mantén tus ojos en alto y hacia adelante. No cruces los brazos o te muevas inquieto, parecerás más accesible y positivo.
Celebra tus puntos fuertes: Todos tenemos algo de lo que estar orgullosos. Si no estás seguro de lo que has logrado, siéntate y anota cada una de las cosas que te agradan de ti mismo. No pares de escribir hasta que hayas llenado la hoja con todas las cosas que amas de ti mismo, como tu sentido del humor, tu paciencia, tu capacidad de compasión, generosidad, etc.
Mantén tu lista cerca, para que si tu fe en ti mismo flaquea, puedas tomar esa hoja y recordarte a ti mismo todo lo bueno que posees.
No seas tan duro contigo mismo si tuviste un mal día: Todos tenemos días malos, el secreto es recordar que es solo eso, un día malo, no una mala vida. Nuca te sentirás completamente bien contigo mismo el 100% del tiempo, nadie lo hace. En lugar, recuerda que "esto también pasará".
Desarrolla una actitud positiva: Aunque no puedes cambiar tu actitud con solo tocar un botón, aun así, puedes trabajar para tener una actitud positiva a diario. Una vez que decides ser positivo, se volverá más sencillo. Aprende a reconocer cuando eres negativo o tienes pensamientos negativos. No hullas de ellos, solo enfréntate a ellos y luego ignóralos. Cuanto más practiques este ejercicio, más fácil te resultará.
Tú tienes mucho que ofrecer: Es posible que no lo veas ahora, y que te sientas inútil, pero no lo eres. Has amado a quienes te necesitan, tienes amigos que te aprecian y posees grandes cualidades. Si necesitas saberlo por ti mismo, habla con un amigo en el que confíes y pregúntales acerca de lo que significas para ellos. En tanto recuerdes que eres importante para las personas, comenzaras a sentirte mejor y tendrás más apreciación hacia ti mismo.
La manera en que te ves no lo es todo: La belleza es subjetiva, y lo que a la sociedad le agrada hoy, puede cambiar drásticamente mañana. No pierdas horas en frente del espejo, intentando esconder lo que ves. Deja de imaginarte como te verías luego de una cirugía imaginaria o una dieta. Aprende a sentirte bien contigo mismo, esto estimulara tu confianza.
Olvida lo que los otros podrían o no pensar de ti: Tú no sabes lo que las personas piensan, ni por lo que ellas mismas están atravesando. Alguien podría mostrar algo "negativo" acerca tuyo, que en realidad es algo de lo que están inseguros ellos mismos. Las personas que tienen confianza en sí mismos no hacen sentir mal a los otros, por lo que no debes dejar que las inseguridades ajenas te afecten a ti.
Claro que esto es más fácil decirlo que hacerlo, pero en lugar de hacer de cuenta que no te importa, pregúntate a ti mismo si realmente deseas agradarle a esa persona y el por qué.
2. Cambia tu manera de pensar
Comparte tus trabajos y logros. Cuando cuentas a los demás que es lo que estás haciendo, la mayoría de las veces te apoyarán. Otra de las ventajas de compartir es que las otras personas te contendrán en tu proceso e incluso te ayudarán, lo que te dará más fuerza para continuar, en especial en momento difíciles.
Vístete como desees: Si te vistes de determinada manera para complacer a los otros, deja de hacerlo. Vístete de manera que te sientas cómodo y con confianza, esto se reflejará en tu comportamiento. Olvídate de la moda, es temporal e incluso poco práctica. La comodidad y confianza son la clave.
Aprende algo nuevo: Comienza un nuevo pasatiempo, aprende una nueva actividad, lee artículos acerca de cosas que te interesen. Mantente informado sobre lo que pasa en la actualidad. Mira un documental o lee libros de historia. Todo esto ejercitará tu cerebro y te dará temáticas interesantes para charlar, a la vez que te dará la oportunidad de conocer personas nuevas.
Acepta cumplidos: Cuando alguien te halaga, es para demostrarte lo contentos que ellos están contigo. No ignores ese cumplido o lo transformes en un "sí, pero aun no soy bueno en…" Cuando uno dice algo positivo acerca de tu persona, di "gracias" y piensa acerca de ello. En ocasiones las otras personas pueden ver cosas sobre ti, que tú no percibes.
Es muy importante que cuando te halaguen, mires a la otra persona a los ojos y le agradezcas sinceramente.
Cuídate y ejercita: Esto no significa que debas estar horas frente al espejo, sino que debes mantener tu higiene personal, cortarte el cabello, limpiar tus uñas, etc. Un cuerpo limpio ayuda a limpiar la mente y a la vez te hace más amigable. No olvides el ejercicio. Cuando tu cuerpo lleva a cabo actividad física, más sangre es bombeada hacia el cerebro y los órganos, y de esta forma tu cerebro libera endorfinas (las hormonas de la felicidad), lo que mejora tu sensación de bienestar, tanto físico como emocional.
Los amigos son personas que no te hacen sentir mal acerca de quién eres. Los amigos "negativos" te hacen sentir miserable. Los amigos verdaderos te apoyarán y alentarán, además de contribuir a tu sensación general de felicidad.
4. Un largo recorrido
Encuentra un modelo en el que inspirarte. Puedes buscar modelos que viva hoy o no, no tiene importancia. Puedes buscar distintas aptitudes de distintos modelos, no importa si son parientes, celebridades, vecinos, o simplemente personas que te agradan, basta que puedas encontrar en ellos algo que te agradaría ser tú mismo, si puedes acercarte a ellos y pedirles consejos, sería ideal.
No abandones tu diario. Mantener tu diario te ayudará a aprender más cosas acerca de tu persona y mantener un rastro de tu progreso. También te recordará como manejaste los problemas en el pasado y te dará una pista de cómo hacerlo en el futuro.
Si necesitas un descanso, tómalo. Si sientes necesidad de descansar y tirarte a ver tv o escuchar música, hazlo, solo tienes que asegurarte de que lo haces con ese propósito y no pierdes tu preciado tiempo en ello.
Ten una red de apoyo. Los amigos o las personas que se encuentran haciendo el mismo recorrido que tu pueden ser de gran ayuda cuando las necesites, y una red con la que contar si sientes que estás flaqueando. Mantente en contacto con ellos, cuéntales tus objetivos, tus miedos, escucha los de ellos, y comparte consejos si es que tienes alguno.