1. Deja que tus hijos afronten los desafíos: permite que tus hijos encuentren soluciones a los problemas por sí solos. Cuando reconocen las pequeñas frustraciones que experimentan y los ayudas a comprenderlas mediante una conversación sin apresurarte a ayudarlos, les enseñan independencia y resiliencia.
2. La disciplina no es un castigo: imponer límites es una forma de enseñar a los niños cómo comportarse en el mundo y ayudarlos a convertirse en personas que pueden controlar sus impulsos y aceptar la realidad incluso cuando es decepcionante.
3. Juega con tus hijos en cualquier cosa: es cierto que el juego suele ser estructurado y familiar, pero no necesitas poner límites en el mundo de juego e imaginación de tus hijos. Deja que elijan la actividad, e incluso si es inusual, no te preocupes por las reglas, simplemente déjate llevar y disfrútalo, ¡ese es el objetivo!
4. Recuerda lo importante que es decir la verdad: todos los padres quieren escuchar la verdad de sus hijos, por lo que es importante darles el mismo ejemplo. Anima a tus hijos a hablar honestamente y actuar con integridad modelando un comportamiento positivo similar, convirtiéndote en un modelo a seguir.
5. Vive un poco más verde: muéstrales a tus hijos lo fácil que es cuidar el medio ambiente y explícales que lo estás haciendo por su futuro. Desperdicia menos, recicla, reutiliza y ahorra. Enséñales que es mejor no apresurarse a tirar cosas y que es posible vivir de manera limpia, económica y sabia.
6. Abraza y besa delante de los niños: la relación entre padres e hijos es el ejemplo más significativo de relación al que están expuestos los niños. Es importante establecer un estándar alto y expresar afecto para que tus hijos crezcan con un modelo de relación positivo al que puedan aspirar en el futuro.
7. Da pequeños elogios por el buen comportamiento: cuando notes que tu hijo ha hecho algo útil o amable, comparte lo que viste desde tu perspectiva y elogia la acción positiva. Es una excelente manera de reforzar el comportamiento positivo, explicar sus beneficios y criar niños más felices.
8. Comparte elogios sobre tus hijos: a veces, lo que escuchamos indirectamente tiene más impacto que lo que se dice directamente, y esto es cierto incluso en la primera infancia. Por lo tanto, una buena y eficaz manera de reforzar los rasgos y comportamientos positivos es dejar que tu hijo te "capte" o te escuche cuando le dices cumplidos a tu abuela o a amigos cercanos.
9. Date permiso para descansar: cuando la vida es excepcionalmente ajetreada y estresante, comprar comida preparada porque estás demasiado cansado para cocinar no te convierte en un mal padre. Recuerda que debes cuidar de tu propio bienestar y el de tus hijos, así que, siempre que sea un evento puntual y no un patrón regular, permítete descansar un poco.
10. Aprende a decir "no" a los compromisos adicionales: resiste la tentación de asumir demasiados compromisos en el trabajo o en cualquier otro entorno si sientes que afectarán significativamente el tiempo de calidad que pasas con los niños. Recuerda que nunca te arrepentirás de pasar tiempo juntos riendo y disfrutando el uno del otro, y tus hijos tampoco lo harán (durante mucho tiempo), a diferencia de algunos lugares de trabajo.
11. No toleres la falta de respeto: no permitas que tu hijo sea extremadamente grosero o te diga cosas hirientes a ti o a otras personas. Deja en claro que ese tipo de comportamiento es inaceptable, evita mostrarlo tú mismo y recuerda que, si bien los padres deben demostrar libertad y respeto hacia sus hijos, los hijos deben mostrar un respeto similar.
12. Intenta hacer tres preguntas personales todos los días: el arte de la conversación es una habilidad social importante que los niños aprenden en parte a través de conversaciones significativas en casa con sus padres. Por lo tanto, es importante fomentar la conversación con preguntas como "¿Cuál fue tu parte favorita de la escuela hoy?" o "¿Qué te hizo sentir como un héroe hoy en la escuela?"
13. No eduques a un niño malcriado: recuerda que cada niño es un tesoro, pero ningún niño es el centro del universo. Los padres deben tener en cuenta este principio breve y simple, ya que es uno de los pasos más importantes para evitar criar niños malcriados. Edúcalos en consecuencia estableciendo expectativas realistas para los deseos y ambiciones que expresan, y recuerda que una palabra amable es una recompensa mucho más valiosa que cualquier regalo tangible.
14. Habla sobre el significado de ser una buena persona: este consejo puede ayudarte enormemente a largo plazo a la hora de criar a tus hijos de acuerdo con tu conciencia y tus principios morales. Empieza a una edad temprana y habla con tu hijo sobre por qué las personas se comportan como lo hacen, qué obtienen de ello, cuáles son sus motivos, etc. Cuando sea pequeño, mientras lees un cuento antes de dormir, pregúntale a tu hijo si los personajes del cuento se están portando bien o no, y por qué.
15. Sirve un plato nuevo una y otra vez: muchos padres se sienten frustrados porque sus hijos no comen una variedad de alimentos, y existe una forma sencilla de lidiar con este problema. Si tu hijo rechaza un plato nuevo, no te des por vencido. Es posible que debas ofrecérselo otras seis, ocho o incluso diez veces antes de que lo pruebe y decida si le gusta. Si es así, genial, si no, no insistas demasiado con el tema e intente preparar otros platos.
16. Disfruta de los pequeños momentos: como es de esperar de un rol tan duro, ser padre es probablemente el trabajo más agotador del mundo. No importa cuánto te esfuerces, probablemente no podrás hacer todo lo que quieres, así que no dejes que esta rutina incesante te impida disfrutar de los pequeños momentos con la familia. Tal vez la casa esté desordenada y la ropa lavada esté tirada en el sofá, pero tu hijo se acaba de reír, ¡así que disfrútalo!
17. Mantén el televisor solo en la sala de estar: los estudios muestran que los niños que tienen un televisor en su habitación pesan más, duermen menos y tienen calificaciones y habilidades sociales más bajas que los niños que crecieron sin un televisor en su habitación. Hasta cierta edad, también es una buena idea quitarles el teléfono móvil por la noche, pero recuerda que, a medida que crecen, merecen recuperar esa independencia y privacidad.
18. Escucha de verdad: cuando tus hijos hablen, préstales toda tu atención, nada de teléfono, televisión ni conversaciones con otras personas. Al prestar una atención tan centrada, se fortalece el vínculo entre padres e hijos y se les enseña a escuchar a los demás.
19. Crea tradiciones familiares: los pequeños rituales como una cena familiar los viernes, noches de cine, bromas privadas o un viaje semanal crean recuerdos maravillosos y un sentido de pertenencia entre los niños y la familia, especialmente con los padres que inician estas actividades.
20. Presenta el aprendizaje como un proceso continuo: a la mayoría de los niños no les gusta estudiar en la escuela, hacer tareas, etc. Este hecho crea mucha fricción entre padres e hijos que se puede evitar enseñando a los niños las muchas ventajas que tiene aprender. Muéstrales cómo aprender de una manera que les convenga, les resulte agradable y los enriquezca con conocimientos que realmente importen para su futuro.
21. Enséñales a los niños a usar protector solar: nuestro mundo se está volviendo un lugar más caluroso y los rayos del sol son mucho más dañinos hoy que en el pasado. Por eso, es importante acostumbrar a los niños a usar protector solar desde pequeños y enseñarles a proteger su piel para prevenir manchas, arrugas e incluso enfermedades como el cáncer de piel en la vejez.
22. Respeta las diferencias en los estilos de crianza: tu y tú pareja pueden tener diferentes principios para criar a los hijos, y eso está perfectamente bien siempre que respeten los puntos de vista de cada uno y encuentren un enfoque de crianza que combine las cosas que les importan a ambos. Traten de evitar en la medida de lo posible los desacuerdos frente a los niños y presenten un frente unido al tomar decisiones sobre la disciplina o al tratar eventos importantes en la vida de sus hijos, como su primera cita, etc.
23. Limitar el tiempo frente a las pantallas: establece límites claros para el uso de las pantallas. Fomenta otras actividades como leer, jugar al aire libre o proyectos creativos.
24. Amar a todos sus hijos por igual, pero tratarlos de manera diferente: si tiene más de un hijo, recuerda que cada niño necesita recibir amor de una manera diferente y comprende que es amado por igual que el resto de la familia. Algunos niños pueden querer pasar media hora viendo la televisión contigo, mientras que otros pueden preferir que les cuentes un cuento antes de dormir. Ambas actividades son aceptables, siempre y cuando enfaticen que amas a todos tus hijos de maneras diferentes pero iguales.
25. Amar incondicionalmente: cuando los padres les demuestran a sus hijos que los aman siempre, incluso durante los momentos difíciles o los desacuerdos sobre su comportamiento, esto genera confianza en sí mismos, un sentido de pertenencia y estabilidad emocional, pilares importantes para criar niños felices que todo padre debe recordar y adoptar en cada etapa de la vida.
