¿Alguna vez has tenido una idea que al principio te pareció brillante, pero luego llegaste a la conclusión de que en realidad no era la más brillante de todas? Bueno, algunas personas actuaron según sus grandes ideas y crearon algunos inventos que terminaron cambiando el mundo. El problema con los inventos es que una vez que están fuera de nuestras manos, el mundo puede manipularlos y utilizarlos de maneras que el inventor nunca soñó. Esto es más o menos lo que les pasó a estos 7 inventores, que llegaron a lamentar profundamente sus patentes que cambiaron el mundo.
Hasta el día de su muerte, Anna Jarvis odió el Día de la Madre. No fue por una relación tensa con su madre, al contrario. Fue por su amada madre, Ann Reeves Jarvis, que Anna fundó el Día de la Madre. La Sra. Jarvis había pasado su vida movilizando a las madres para que cuidaran de sus hijos y quería que se reconociera el arduo trabajo de las madres. Cuando murió en 1905, Anna, desconsolada, decidió cumplir el sueño de su madre y dedicar un día especial a celebrar a las madres.
El primer Día de la Madre que se celebró, el 10 de mayo de 1908, Anna Jarvis estaba emocionada. Aunque no asistió al primer evento, celebrado en la iglesia de Grafton, Virginia Occidental, donde su madre enseñaba en la escuela dominical, envió 500 claveles blancos en su honor. Lo que apagó el entusiasmo de Anna fue la rapidez con la que se comercializó el Día de la Madre. De hecho, llegó a llamar a los floristas y a las industrias de las tarjetas de felicitación “charlatanes, bandidos, piratas, mafiosos, secuestradores y termitas que socavarían con su codicia uno de los movimientos y celebraciones más finos, nobles y auténticos”.
Sentirte molesto por los anuncios emergentes es un sentimiento bastante universal, así que imagina lo que podría sentir el inventor, Ethan Zuckerman, al saber que es responsable de una de las características más odiadas de Internet. Bueno, Zuckerman es completamente consciente de la situación, e incluso escribió un ensayo completo para The Atlantic en 2014, asumiendo toda la responsabilidad y disculpándose por la molesta molestia que creó.
En el ensayo, explicó que la intención detrás de los anuncios emergentes era permitir que aparecieran anuncios cuando los usuarios visitaran una página sin asociar necesariamente el anuncio con el contenido de la página. A él y a la empresa para la que trabajaba en ese momento se les ocurrió la idea después de que una importante empresa de automóviles se asustara porque su anuncio apareciera en un sitio web de contenido para adultos. "Terminamos creando una de las herramientas más odiadas en el conjunto de herramientas del anunciante: el anuncio emergente. Lo siento. Nuestras intenciones eran buenas".
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Durante la Segunda Guerra Mundial, la potencia de fuego de Rusia tuvo dificultades para seguir el ritmo de la de Alemania. Mikhail Kalashnikov, que sirvió en un tanque al comienzo de la guerra y ya había ideado algunas mejoras para los tanques, se propuso crear un modelo de rifle mejorado para el ejército de su país. En 1947, se lanzó el AK-47. Las letras son una abreviatura de Avtomat Kalashnikova, y los números indican el año en que se fabricó por primera vez. La nueva arma automática demostró ser pragmática, duradera y liviana.
Kalashnikov falleció en 2014, lo que significa que vivió lo suficiente para ver cómo su invento se volvía extremadamente popular y el favorito de terroristas y señores de la guerra de todo el mundo. "Sigo volviendo a las mismas preguntas. Si mi rifle se cobró la vida de las personas, ¿puede ser que yo..., un creyente ortodoxo, sea el culpable de sus muertes?" escribió en una carta al jefe de la Iglesia Ortodoxa Rusa en 2010. En otra ocasión, fue citado diciendo: "Preferiría haber inventado una máquina que la gente pudiera usar y que ayudara a los agricultores con su trabajo, por ejemplo, un cortacésped".
Otro invento de la guerra que sacudió al mundo fue la bomba atómica. Se atribuye a J. Robert Oppenheimer, quien fue director del Laboratorio de Los Álamos durante la Segunda Guerra Mundial. Aunque Albert Einstein no participó directamente en el desarrollo del arma real, fue su trabajo el que hizo posible la bomba.
Después de la guerra, Oppenheimer expresó sentimientos encontrados sobre su invento. "No me arrepiento de la fabricación de la bomba... En cuanto a cómo la usamos, entiendo por qué sucedió, pero no tengo la sensación de que se haya hecho bien. "Nuestro gobierno debería haber actuado con más previsión y claridad al decirle al mundo y a Japón lo que significaba la bomba", dijo.
El arrepentimiento expresado por Einstein, por otro lado, fue mucho más inequívoco. "Si hubiera sabido que los alemanes no lograrían producir una bomba atómica", dijo, "nunca hubiera movido un dedo".
Hoy en día, el cubículo se ha convertido en un símbolo de la monotonía del trabajo de oficina; sin embargo, la intención original del diseño era completamente opuesta. Bob Prost, responsable de la invención de los cubículos de oficina, pensó que darían a los trabajadores más libertad y la capacidad de trabajar en una variedad de entornos.
Sin embargo, las empresas vieron el diseño como una forma de reducir costos al eliminar las oficinas individuales. A medida que más y más empresas adoptaron el diseño, sus versiones se comercializaron cada vez más como pequeñas cajas cerradas en lugar del espacio flexible que Propst pretendía. Propst llegó a lamentar su invención. En 1997, escribió al New York Times que “el cubículo de las personas en las corporaciones modernas es una locura monolítica”.
Parece que los sistemas para preparar café como Nespresso y Tassimo no hacen más que ganar popularidad. Un hombre que se niega a seguir la tendencia es John Sylvan, que también es el inventor de las cápsulas de café. “Son bastante caras de usar. Además, el café de filtro no es difícil de hacer”, le dijo a The Atlantic.
Resulta que Sylvan no es el mayor fanático de su propia invención, por decir lo menos. “A veces me siento mal por haberlo hecho”, incluso admitió. Tiene algunas razones para esta aversión: las cápsulas no son reciclables ni biodegradables, y brindan un fácil acceso a la cafeína, que puede ser adictiva. “Es como un cigarrillo para el café, un mecanismo de suministro de una sola porción para una sustancia adictiva”.
"¿Por qué alguien se arrepentiría de inventar algo tan lindo?", te preguntarás. Bueno, el labradoodle original fue creado en la década de 1980 por Wally Conron, un gerente de cría de cachorros de la Asociación Real de Perros Guía de Australia. Se le pidió que creara un perro guía que no perdiera pelo para una mujer ciega cuyo esposo era alérgico a los perros. El resultado fue un labradoodle, un cruce entre un labrador retriever dorado y un caniche estándar, que ahora es el híbrido más buscado en el mundo. Además, la gente está constantemente tratando de crear sus propios híbridos: Goldendoodles (Golden Retriever/Caniche), Schnoodles (Schnauzer miniatura/Caniche), Cavoodless (Cavalier King Charles Spaniel/Caniche), la lista continúa.
El problema con los cruces de caniches es que sufren diversas dolencias: problemas en los ojos, en las caderas, en los codos, incluso epilepsia. “Abrí una caja de Pandora, eso es lo que hice”, dijo Conron a Psychology Today. “Mucha gente cría perros solo por dinero. Muchos de estos perros tienen problemas físicos”.
