En nuestro camino como padres, la transición de nuestros hijos de la niñez a la edad adulta es una etapa crucial caracterizada por bastantes desafíos. Sin embargo, cuando nuestros hijos mayores enfrentan dificultades, ya sean emocionales, financieras o de otro tipo, la dinámica del apoyo de los padres también debe evolucionar y cambiar. Es bastante difícil hacer este cambio, ya que la línea entre ofrecer ayuda y menospreciar el nivel de independencia de los hijos puede ser muy delgada a los ojos de ellos. Y, sin embargo, todo padre debe conocer formas efectivas de conectarse con sus hijos mayores, no sólo para poder brindarles apoyo, sino también para aprender a apreciar su independencia y determinación.
Por qué es importante volver a conectar con los hijos que enfrentan dificultades cuando son adultos
Tus hijos siempre necesitarán que estés ahí para ellos, incluso cuando sean adultos. Si están luchando con algo, pueden sentirse aislados, creer que no los entienden e incluso sentirse abrumados por las circunstancias de sus vidas. Una relación sólida con los padres puede proporcionar a los niños un sentido de seguridad y pertenencia, necesario para afrontar los diversos desafíos de la vida en cada etapa. Además, los hijos adultos también necesitan apoyo emocional, buenos consejos y, a veces, ayuda práctica, pero es necesario mantener el equilibrio y saber cuándo darles espacio para que crezcan y se desarrollen y cuándo atraparlos cuando se caen. Para ello debes fortalecer el vínculo familiar y hacerles saber que no están solos en sus luchas.
Diez formas de conectarse con tus hijos mayores que se enfrentan contra dificultades
Volver a conectar con tus hijos adultos requiere paciencia, comprensión y un enfoque calculado. Este viaje puede ser complicado y diferente para cada padre, pero es probable que se vean involucradas dificultades relacionadas con las emociones, el dinero o incluso el alma. Para afrontar estos desafíos, aquí hay 10 formas recomendadas de fortalecer la relación con tus hijos, que te ayudarán a transmitirles el mensaje de que los apoya a ellos y a su independencia.
1. Escucha sin intentar corregir
Los hijos adultos que tienen dificultades con algo a menudo solo necesitan que alguien los escuche, sin responder inmediatamente con una solución. Muéstrales que comprendes sus sentimientos y puntos de vista simplemente escuchándolos y pensando en lo que dicen, sin intentar ayudarlos de inmediato. Ciertamente puedes hacerles preguntas que les ayuden a ampliar el tema, pero debes hacerles preguntas que les permitan abrirse a su propio ritmo, como "¿Y cómo te sientes al respecto?". Este enfoque le ayudará a crear un entorno seguro y de apoyo para tus hijos y te ayudará a mantener una comunicación abierta.
2. Ofrecer apoyo incondicional
El apoyo incondicional es necesario para un hijo adulto que está luchando con algo, para que pueda sentirse aceptado y comprendido. Deja claro que amas incondicionalmente, sin importar éxitos o logros, y si logras crear esa base, realmente prepararás el terreno para una relación en la que tus hijos se sentirán seguros para revelar sus miedos y desafíos, sin miedo a juicio de tu parte.
3. Fomenta los esfuerzos, por pequeños que sean
Celebra con tus hijos cada pequeña victoria, reconoce el esfuerzo que invierten para afrontar los retos diarios y eleva su moral lo máximo posible. Esto les ayudará a sentir que avanzan hacia su objetivo y a no estresarse por alcanzar la perfección, lo que afectará mucho a su nivel de motivación para continuar y no darse por vencidos.
4. Respeta su viaje de independencia
Es importante recordar que tus hijos adultos tienen un camino de vida que puede ser diferente al que tú esperabas o pretendías para ellos. Sin embargo, debes respetar la independencia de tus hijos y apoyarlos para que tomen decisiones que sean adecuadas para ellos, incluso si no estás de acuerdo con ellos al 100%. Lo más importante es que generes confianza y respeto mutuo, para que puedas mantener una relación sana con ellos.
5. Este es el momento adecuado para dar ayuda práctica
La ayuda que puedes brindar puede ser financiera, burocrática o incluso relacionada con diferentes habilidades para la vida que tengas. Lo importante es que ofrezcas la ayuda de una manera que empodere a tus hijos y no les haga sentir incapaces o dependientes de ti. No es fácil, pero puedes, por ejemplo, ofrecerte a mostrarles lo que hay que hacer y permitirles que te ayuden en el camino.
6. Comparte tus propias experiencias y debilidades
Es posible que tus hijos te perciban como personajes fuertes que pueden afrontar muchas cosas y es posible que no sean conscientes de las dificultades por las que has pasado en tu vida y de la forma en que las has afrontado. Si les revelas los momentos en los que encontraste cierta dificultad y les cuentas cómo te sentiste y cómo los superaste, se sentirán menos solos en sus luchas.
7. Adoptar intereses compartidos
Encuentra un lenguaje común con pasatiempos o programas de televisión que ambos disfruten, y esto les ayudará a crear conversaciones sobre temas que no tengan presiones ni dificultades. Ya sea cocinar, hacer senderismo o asistir a diversos eventos, estas actividades compartidas pueden fortalecer su vínculo con distracciones bienvenidas.
8. Mantén límites saludables
Debes respetar los límites de tus hijos en lo que respecta a la independencia y la privacidad, y es posible que ya hayas recibido pistas y hayas comprendido dónde deberían estar esos límites. Podría ser una línea relacionada con la privacidad en una relación, tal vez sea una línea relacionada con dar consejos no solicitados, pero no importa lo que sea, si los niños han decidido que la línea existe, no puedes cruzarla.
9. Fomenta la búsqueda de ayuda profesional si es necesario
A veces, la mejor manera de apoyar a tus hijos adultos es animarlos a buscar ayuda profesional. Puede ser un terapeuta profesional, o también un consultor en el área donde tus hijos tienen dificultades. Fortalece en tus hijos el sentimiento de que pedir ayuda no muestra debilidad, sino todo lo contrario, muestra fortaleza, porque es el primer paso, y el primer paso es el más difícil, pero tú estarás ahí para ellos durante todo el recorrido.
10. Ten paciencia y evita presionar a tus hijos
Se necesita tiempo para cambiar y debes tener paciencia con tus hijos para permitirles encontrar su propio camino o si tu relación aún no está donde quieres que esté. No los presiones en la dirección que crees que es la correcta y, en cambio, ofrece tu presencia y ayuda, para demostrarles que no importa en qué punto de su camino se encuentren, siempre estarás a su lado.
Unas palabras para concluir..
Reconectar con los hijos cuando son adultos requiere un equilibrio entre apoyo, respeto y amor. Tienes que demostrarles que estás ahí para ellos, pero no necesariamente de la manera que crees que es correcta, sino de la manera que ellos necesitan. Escucha lo que dicen, no critiques, respeta su independencia, participa en actividades conjuntas y fomenta la valentía de tus hijos: estas son las cosas que les ayudarán a afrontar sus desafíos y fortalecer su relación.
