Esta es una pregunta que surge a menudo: ¿cómo se mantienen los japoneses más sanos y delgados que el resto del mundo? De hecho, en la isla de Okinawa, la gente suele vivir más de 100 años, y se dice que su dieta es la principal razón de ello.
La dieta tradicional japonesa incluye mucho marisco y verduras frescas. El pescado, que es rico en ácidos grasos omega-3 saludables para el corazón, es también un elemento básico de su cocina.
Algunos alimentos japoneses sorprendentes que son excelentes para la salud son las verduras crucíferas ricas en calcio, como el bok choy, los ñames ricos en antioxidantes, las algas ricas en yodo (buenas para la tiroides), los alimentos integrales de soja y las setas shiitake (una buena fuente de hierro, potasio, zinc, cobre y folato).
Otro aspecto importante de la cocina japonesa es que eliminan muchos alimentos procesados y se centran más en los alimentos locales cultivados orgánicamente.
La próxima vez que visites un restaurante japonés, busca opciones saludables como la sopa de miso, que contiene algas y tofu. El sashimi, los platos fritos como la tempura y los salteados de verduras también son buenas opciones.
2. Griega
La dieta griega está considerada como una de las más saludables del mundo, ya que se basa principalmente en verduras de hoja oscura, alubias con alto contenido en fibra, lentejas, cereales, pescado rico en omega-3 y yogur. Todos estos alimentos contienen muchos ingredientes que refuerzan el sistema inmunitario y combaten el cáncer. A los griegos también les encanta utilizar aceite de oliva en sus comidas, que tiene menos grasas saturadas que la mantequilla.
Curiosamente, según una investigación de la Universidad de Harvard, una dieta tradicional de estilo mediterráneo está vinculada a un riesgo un 25% menor de muerte por enfermedad cardíaca y cáncer. Además, un análisis de los patrones dietéticos de los habitantes de Creta, la isla griega más grande y poblada, muestra muchas sustancias protectoras, como el selenio, el glutatión, una proporción equilibrada de ácidos grasos esenciales, altas cantidades de fibra, antioxidantes y vitaminas E y C.
Hoy en día, la mayoría de las grandes ciudades cuentan con restaurantes griegos. Busque platos como pescado y espinacas a la parrilla, souvlaki (trozos de carne asados en una brocheta) o louvi (ensalada de judías negras).
3. Mexicana
Cuando la mayoría de nosotros pensamos en la comida mexicana, nos imaginamos al instante tacos cargados de queso fundido, burritos densos en calorías o carnes repletas de sodio. Pero aléjate de estas opciones típicas y encontrarás muchas opciones saludables para elegir en la auténtica cocina mexicana. La dieta tradicional mexicana está basada en plantas; consiste en frijoles, sopas, aguacates, maíz y salsas a base de tomate. Las alubias son una excelente fuente de micronutrientes como el magnesio, el hierro, el potasio y el zinc. Por su parte, los aguacates, el maíz y los tomates están cargados de vitaminas y minerales esenciales.
Busca en el menú de un auténtico restaurante mexicano platos con muchas verduras preparadas de forma saludable en lugar de comidas con mucho queso o crema agria.
4. Coreana
Kimchi
La comida coreana ha empezado a hacerse bastante popular en todo el mundo en los últimos años, ya que es deliciosa y saludable a partes iguales. Uno de los platos más saludables de la cocina coreana es el kimchi, un plato de verduras fermentadas. Se compone de ingredientes nutritivos, como el jengibre, el pimiento rojo y el ajo, y está repleto de nutrientes como la vitamina B6, la vitamina C, la vitamina K, el folato y el hierro. También se supone que beneficia a los niveles de colesterol.
Otra característica de varios platos coreanos es que hay condimentos preparados como el gochujang, una pasta de chile rojo fermentado que es rica en proteínas, antioxidantes y vitaminas, y baja en grasas y calorías.
Aparte del kimchi, aquí tienes otros muchos platos coreanos saludables que puedes probar:
* Bibimbap (un bol de arroz coreano)
* Kimba/Gimbap (rollos de algas y arroz)
* Konggusku (sopa fría de fideos con leche de soja)
* Soondubu jjigae (guiso de tofu suave).
5. India
Rajma Chawal
En Occidente existe la percepción popular de que la comida india es demasiado picante y aceitosa. Quizá le sorprenda saber que la auténtica comida india es bastante saludable y abundante en potentes hierbas y especias.
Especias como la cúrcuma, el jengibre, los chiles rojos, la canela, el cilantro y el cardamomo son la característica principal de los platos indios. Además de realzar el sabor, estas especias son excelentes para la salud. Por ejemplo, se ha estudiado la capacidad de la canela para reducir la inflamación y estabilizar los niveles de azúcar en sangre, así como su efecto para combatir el cáncer. La cúrcuma, el cardamomo y el cilantro, por su parte, son conocidos por sus efectos antiinflamatorios.
Otros ingredientes saludables de la cocina india son las frutas, las verduras, los frutos secos y las semillas. El yogur es un acompañamiento popular en varios platos indios, y tiene un alto contenido en proteínas, calcio, vitaminas y probióticos. Las lentejas, que pueden reducir el colesterol y proteger contra la diabetes y el cáncer de colon, suelen combinarse con especias para preparar el dal, que se sirve con arroz.
Cuando esté en un restaurante indio, pida un curry de verduras con Dal. También puedes buscar rajma chawal (alubias rojas servidas con arroz hervido).
6. Tailandesa
Tom Yum Gung soup
La comida tailandesa suele ser sabrosa y rica en verduras, proteínas magras y hierbas y especias frescas. Un ejemplo de plato tailandés básico es el Tom Yum Gung, una sopa hecha con camarones , caldo, hierba limón, galanga, chiles y otros ingredientes. Las investigaciones sugieren que los ingredientes de esta sopa son 100 veces más eficaces para inhibir el crecimiento de tumores cancerosos que otros alimentos.
Las especias saludables, como el jengibre y la cúrcuma, también se utilizan mucho en los platos tailandeses. La cúrcuma, que contiene un compuesto llamado curcumina, es conocida por sus beneficios antiinflamatorios. El jengibre, por su parte, ayuda a la digestión.
Cuando pidas comida tailandesa, busca platos centrados en las verduras o que incluyan mucho marisco. Los rollitos de primavera, la ensalada de papaya, el pollo larb, el pescado al vapor y las verduras son excelentes opciones.
7. Israelí
Falafel
Un estudio de 2015 que analizó a residentes de 187 países descubrió que los israelíes tienen una de las dietas más nutritivas del mundo. Esto no es especialmente sorprendente, ya que sus habitantes comen muchas frutas y verduras, cereales integrales y pescado. Muchos de los platos locales más populares contienen también aceitunas, aceites saludables, frutos secos y aguacates.
Los alimentos básicos de la dieta israelí son bastante similares a los de sus homólogos mediterráneos: legumbres, berenjenas y aceite de oliva. Y como ya hemos mencionado anteriormente, la dieta mediterránea ha sido ampliamente estudiada por su capacidad potencial para combatir varios problemas de salud.
El humus, un popular plato de Oriente Medio hecho con garbanzos, tahini, zumo de limón, ajo y aceite de oliva, aporta una buena dosis de proteínas, carbohidratos y fibra. El falafel, que se ha convertido en una de las señas de identidad de la cocina local, se elabora con garbanzos o habas y es una buena fuente de fibra y proteínas. El elemento tahini que se encuentra tanto en el hummus como en el falafel, también es muy saludable, ya que está repleto de minerales como cobre, manganeso, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc, molibdeno, vitamina B1, selenio y fibra dietética.
8. Italiana
No, no estamos hablando de pizzas de plato hondo ni de lasaña pegajosa rellena de queso extra. La cocina italiana tradicional es algo más que los alimentos que se sirven en nuestro local de comida rápida, que suelen estar cargados de grasa y calorías.
La cocina italiana típica es rica en tomates frescos, aceite de oliva, ajo, orégano, perejil y albahaca. Los estudios han demostrado que el licopeno de los tomates puede ayudar a proteger a las mujeres del cáncer de mama. Dado que muchos platos italianos están cargados de tomates frescos, puede disfrutar de sus beneficios comiendo más platos italianos. Además, el ajo y las hierbas tradicionales italianas aportan vitaminas A y C, mientras que el aceite de oliva ayuda a reducir el colesterol y a combatir las enfermedades del corazón.
Además, los alimentos tradicionales de esta cultura suelen incluir cereales integrales, frutas, verduras y legumbres, así como muchas hierbas y especias que son excelentes para la salud.
Prueba incluir en tus comidas diarias una buena pasta italiana, una ensalada o una sopa cargada de verduras.
9. Española
La dieta española está considerada como una de las más saludables del mundo. Al ser otro país mediterráneo, su cocina suele estar llena de sabor y se basa en el aceite de oliva, el marisco fresco y una gran variedad de verduras. El sello de la tradición española son las tapas (pequeños platos de comida), que ayudan a mantener el tamaño de las porciones bajo control. Además, las tapas permiten disfrutar de una variedad de platos en una sola comida.
Algunos platos españoles súper saludables que puedes pedir son las patatas bravas, los calamares, el gazpacho (una sopa fría de tomate y verduras llena de licopeno que combate el cáncer), las croquetas y la paella (hecha con arroz, azafrán, verduras, pollo y marisco cocido).
Un vaso ocasional de vino tinto cardiosaludable al final del plato principal también sería estupendo.
10. Vietnamita
Pho soup
La comida vietnamita es rica en hierbas frescas, muchas verduras y marisco. Además, es naturalmente baja en grasas, no tiene gluten y está repleta de vitaminas y minerales.
Uno de los platos vietnamitas más saludables y deliciosos es el pho. Esta aromática sopa de fideos a base de caldo está llena de especias y nutrientes llenos de antioxidantes. Además, es baja en grasas y tiene ingredientes fáciles de digerir.
Los fideos vietnamitas suelen ser a base de arroz, lo que los hace fáciles de digerir. Sus ensaladas, como la ensalada de gambas y papaya, son increíblemente nutritivas y se sabe que contienen muchas vitaminas y minerales, por ejemplo, vitamina C, vitaminas B1, B6 y B3, folato, biotina, zinc, cobre, magnesio y potasio.
Una de las cualidades más destacadas de la cocina vietnamita es que los alimentos se cocinan utilizando agua o caldo en lugar de aceites, lo que los convierte en una opción increíblemente saludable.
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