Si estás pensando en comprar una joya con algún tipo de diamante, es posible que las opciones (y los rangos de precios) sean muy amplios. El color, el quilate, la claridad y el corte de la gema pueden afectar significativamente el precio. Además, la sabiduría convencional dice que debes esperar gastar al menos tres meses de salario en la joya.
Cada vez más comunes en el mercado, los diamantes de laboratorio o sintéticos son réplicas perfectas de los diamantes de la naturaleza, pero se fabrican en un laboratorio en lugar de extraerse de la tierra. Además, como son un 20-40% más económicos que los diamantes naturales, podrían ayudarte a obtener la joya que deseas sin tener que acudir al banco.
Diferencias entre diamantes tradicionales y las alternativas
Diamantes simuladores: estos son materiales que imitan la apariencia de un diamante pero no son diamantes. Estas piedras probablemente serán zirconia cúbica o moissanita, ambas tienen su propia composición química que no coincide con los diamantes reales. Si bien estas opciones son económicas, cualquiera que tenga un buen ojo puede diferenciarlas de las reales y no quedar tan bien como con un diamante real.
Diamantes creados en laboratorio: estos diamantes creados artificialmente son indistinguibles química y visualmente: incluso un joyero necesitaría usar un equipo especializado para notar la diferencia. Si bien son menos costosos que los diamantes naturales, los diamantes sintéticos en colores exóticos pueden ser especialmente económicos: algunos colores que son difíciles de encontrar en la naturaleza son fáciles de crear en un laboratorio, lo que representa una gran diferencia de precios.
Diamantes minados: estos son los diamantes en los que piensas cuando escuchas la palabra diamantes. Han sido creados por la naturaleza y se extraen de la tierra en una variedad de tamaños, colores y calidades.
¿Cómo sabes qué tipo de diamante estás obteniendo?
El vendedor debe decirte claramente lo que están ofreciendo. Los diamantes simuladores se etiquetarán como el tipo de piedra que son, y podrías ser capaz de notar la diferencia si sabe qué estás buscando.
Si bien los diamantes creados en laboratorio y los minados no se diferencian visualmente, cualquier vendedor de buena reputación debería identificar claramente el origen del diamante. Si no estás del todo seguro, pregunta qué tipo de diamante estás buscando y solicita alguna certificación.
Los diamantes creados en laboratorio son más éticos
La industria estadounidense de las gemas tiene salvaguardas para garantizar que los diamantes que se venden en el país no sean diamantes de sangre. Sin embargo, el proceso de certificación sin conflictos ha sido criticado como ineficaz, y todavía puede permitir diamantes que se financian a través de crímenes de guerra o con abusos de los derechos humanos.
Por lo tanto, como resultado, algunos joyeros han comenzado a vender diamantes "éticos" asegurando que los trabajadores fueron compensados de manera justa y que el medio ambiente no se vio perjudicado por su minería. Sin embargo, este término y certificación aún no están estandarizados en toda la industria.
Sin embargo, comprar un diamante creado en laboratorio evita por completo este atolladero ético. Ningún diamante creado en laboratorio es un diamante de sangre y, para aquellos que están preocupados por el medio ambiente, no tienen el impacto ambiental negativo que tiene la extracción de diamantes reales.
¿Por qué no comprarías un diamante creado en laboratorio?
Como ya se ha mencionado, los diamantes de laboratorio son indistinguibles de los diamantes reales, son más baratos y no se han financiado de forma conflictiva. Entonces, eso deja una gran pregunta: ¿por qué no querrías comprar un diamante creado en laboratorio? Hay algunas razones por las cuales un diamante artificial podría no ser la opción correcta, tanto a nivel práctico como sentimental.
Tamaño: los diamantes sintéticos vienen en una variedad de tamaños, pero todavía no puedes obtenerlos en la variedad de tamaños con la que podrías obtener un diamante de minería. Las piedras sintéticas generalmente alcanzan hasta 1,5 quilates, aunque a veces se pueden encontrar tamaños más grandes por un costo.
Color: los diamantes naturales vienen en una amplia gama de colores, más allá del blanco, incluidos el amarillo, azul, morado, verde, rosa, rojo y naranja. Si bien algunos de estos colores son más raros, y por lo tanto más caros, muchos simplemente no existen en los diamantes sintéticos. Azul, amarillo y rosa son colores comunes en diamantes sintéticos y es probable que sean menos costosos que sus contrapartes minadas, pero otros colores son más difíciles o imposibles de encontrar.
El factor "romántico": hay un factor sentimental en la compra de un diamante natural que podría tener millones de años, y quizás no sea lo mismo comprarle a un ser querido un diamante que se fabricó en un laboratorio unos meses antes.
Lo que decidas comprar se reduce a lo que estás buscando y a cuánto estás dispuesto a pagar. Si buscas algo económico, un diamante sintético puede ser una gran compra, siempre que esté disponible en el color y tamaño que te interese. Sin embargo, si el estilo que estás buscando no está disponible sintéticamente, un diamante natural es probablemente la única opción. Aún así, con la variedad disponible en diamantes hechos por el hombre, hay muchas posibilidades de que puedas encontrar algo que te sirva si no puedes comprar un diamante natural.
¿Dónde debo comprar diamantes?
Los diamantes, especialmente los de gama alta, son algo que querrás ver en persona antes de querer comprarlos. Por lo tanto, el primer paso para comprar la piedra adecuada debería ser consultar a los joyeros locales para ver cuáles ofrecen lo que estás buscando, ya sea hecho por el hombre o natural.
Si tienes dificultades para encontrar gemas sintéticas localmente, generalmente puedes comprarlas directamente del fabricante.
Fuente: dealnews
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