Tus pulmones juegan un papel importante en mantener cada órgano de tu cuerpo funcionando correctamente. Los pulmones trabajan todos el tiempo.
Cuando inhalas, tus pulmones, si están sanos, absorben oxígeno y lo pasan al torrente sanguíneo, que luego lo transporta a los órganos y células de todo el cuerpo. Al exhalar, los pulmones sanos descartan dióxido de carbono. Sin embargo, muchas personas en el mundo sufren problemas pulmonares. Según la Asociación Americana del Pulmón, más de 11 millones de estadounidenses padecen una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), que se define como un grupo de condiciones pulmonares que dificultan vaciar el aire de los pulmones debido a las vías respiratorias estrechas.
La asociación también sugiere que otros 12-24 millones de personas pueden padecer esta condición sin darse cuenta. Junto con la EPOC, algunas otras infecciones pulmonares comunes son el asma, tuberculosis, bronquitis, fibrosis quística y enfisema. Los fumadores y las personas que están frecuentemente expuestas al humo del tabaco corren mayor riesgo de desarrollar una enfermedad pulmonar. Otros factores que ponen sus pulmones en riesgo incluyen infecciones y exposición a alérgenos, contaminación del aire, humos en el lugar de trabajo, aserrín u otras partículas.
Para mantener los pulmones sanos, debes conocer los signos que indican un problema pulmonar. Abordarlo temprano te ayudará a proteger tus pulmones de daños severos, mientras que reduces el riesgo de enfermedades pulmonares crónicas y cáncer.
A continuación te presentamos algunos signos clave que indican que tus pulmones podrían estar en problemas.
3. Aumento de la mucosidad
La tos suele ir acompañada de la producción de mucosidad. El moco ayuda a mantener los gérmenes, la suciedad, el polen y las bacterias de quedar atascado en los pulmones. Sin embargo, no es una buena señal cuando se comienza a producir más moco que no es debido a un resfriado u otra enfermedad común.
Además, puede notar cambios en el color, olor o grosor. De hecho, si la mucosidad se vuelve amarilla o verde, o si contiene sangre, es una clara señal de que algo va mal con tus pulmones.
La sangre puede ser un signo de enfisema, bronquitis crónica o cáncer de pulmón.
4. Respiración persistente
Un sonido sibilante es una señal de que las vías respiratorias se estrechan. Debido a este estrechamiento, el aire no fluye tan rápido como debería, lo que da lugar a un sonido sibilante cuando se respira. Las sibilancias persistentes pueden ser un signo de asma o enfisema. También puede ser un signo de cáncer de pulmón. Por lo tanto, si estás respirando con dificultad, debes visitar a tu médico tan pronto como sea posible.
5. Hinchazón en la parte inferior de tu cuerpo
Por extraño que parezca, hinchazón, dolor y sensibilidad en los pies o las piernas pueden indicar que hay algún tipo de problema con los pulmones.
Cuando los pulmones no están funcionando adecuadamente, tu sistema circulatorio no recibe el oxígeno que necesita para mantenerse sano y mantener fluidos moviéndose por todo el cuerpo. Esto puede causar acumulación de líquido, lo que hace que los tobillos y los pies se hinchen.
Además, debido al mal funcionamiento de los pulmones, tu corazón no puede bombear suficiente sangre para suministrar los riñones y el hígado. Esto significa que estos órganos no son capaces de eliminar las toxinas y eliminar el líquido de tu sistema como deberían. Esto también da lugar a la hinchazón en el cuerpo.
Si regularmente comienzas a despertare con dolores de cabeza y / o mareos, debes visitar a su médico.
Un problema pulmonar como la EPOC puede hacer que te despierte después de una noche de sueño con un dolor de cabeza sordo y palpitante. Esto sucede porque no estás respirando lo suficientemente profundo mientras duermes, lo que lleva a una acumulación de dióxido de carbono en el cuerpo. Esta acumulación hace que los vasos sanguíneos en el cerebro se dilaten, lo que da lugar a un dolor de cabeza palpitante.
7. Fatiga
Cuando tus pulmones no funcionan correctamente te cansarás más fácilmente. Si tus pulmones no ofrecen suficiente oxígeno a tu cuerpo, otros sistemas corporales también comienzan a sufrir y esto puede afectar a tus niveles de energía.
8. Problemas para dormir
Si te resulta difícil dormir en una cama debido a problemas de respiración o si dormir en una silla es más cómodo para ti, entonces probablemente tiene algo que ver con sus pulmones. Acostarse en una cama hará que tus pulmones trabajen más. Esto afectará tu calidad del sueño y a tu salud mental y física.
Consejos para mantener sanos los pulmones
• Deja de fumar. Los productos químicos dañinos afectan la salud de tus pulmones y lo pone en un alto riesgo de enfermedad pulmonar y cáncer.
• Evita la exposición pasiva al humo. Es altamente tóxico y dañino para los pulmones.
• Evita ir a zonas altamente contaminadas e industrializadas. Si necesitas ir a tales lugares, usa una máscara para evitar la inhalación.
• Obtén plantas de interior para mejorar la calidad del aire de tu hogar.
• Haz ejercicio diariamente para aumentar tu capacidad pulmonar.
• Come de manera saludable y asegúrate de incluir alimentos desintoxicantes y ricos en antioxidantes en tu dieta.
Fuente: top10homeremedies
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