Se recomienda abordar este problema lo antes posible llevando al perro al veterinario y descartando cualquier condición médica que pueda confundirse con signos de ansiedad por abandono. Si realmente se trata de ansiedad por separación, existen varias formas de ayudar a su perro a acostumbrarse a que lo dejen solo.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que este proceso requiere tiempo y paciencia. Si descubres que tus esfuerzos de adiestramiento están exacerbando tu ansiedad, puede ser mejor dar un paso atrás y cambiar tu enfoque o incluso buscar ayuda de un adiestrador de perros profesional.
También es importante tener en cuenta que HAY una solución para la ansiedad por separación en los perros que casi siempre funciona: tener un segundo perro. Un segundo perro, si bien aumenta los gastos, en realidad genera menos trabajo para ti, ya que entretiene y hace compañía al otro perro, lo que hace felices a ambos. Por supuesto, esto no es factible en muchos hogares, y por eso tenemos los siguientes 5 consejos para ti:
Dedica algo de tiempo cada día a entrenar a tu perro, centrándote en la idea de que debe esperar recibir una recompensa después de calmarse, en lugar de esperar ansiosamente tu regreso. Cuando regreses del trabajo o de hacer recados, evita que sea una ocasión extravagante y alegre para tu amigo peludo. Simplemente quítate los zapatos, toma un trago de agua y permite que tu perro se relaje. Una vez que se haya calmado, puedes recompensarlo con atención, llevándolo a caminar afuera o jugando con su juguete favorito.
El objetivo es enseñar al perro que su excitación no debe provenir de tu llegada sino de la recompensa que le sigue una vez que se ha calmado. Esto ayudará a desviar su atención de centrarse en cuándo te vas o esperar ansiosamente a que regreses para encontrar consuelo dentro de él.
El adiestramiento con jaulas puede ser muy beneficioso para aliviar la ansiedad por separación en los perros. Es fundamental garantizar que la caja sea cómoda y tranquila. Nunca obligues al perro a entrar como forma de castigo. En su lugar, trata de que perciba la caja como un refugio seguro donde se sienta seguro y protegido. Para reforzar esta sensación, dale a tu compañero canino una golosina que no pueda devorar de un solo trago mientras esté dentro del recinto. Por ejemplo, intenta utilizar un juguete de alimentación lenta lleno de mantequilla de maní.
Otro enfoque es permitir que tu perro consuma sus comidas dentro de los límites de la jaula como una forma de refuerzo positivo. Con el tiempo, tu amigo peludo asociará la jaula con la relajación, el sueño y la nutrición. Esto les permitirá buscar consuelo en él cuando no estés en casa y aliviar cualquier ansiedad que puedan experimentar.
Puedes entrenar a tu perro para que sea independiente introduciendo gradualmente breves períodos de separación durante sus interacciones. Por ejemplo, déjalos en el dormitorio mientras vas al baño y cierras la puerta. Aunque todavía pueden oírte desde afuera, es importante que comprendan que es aceptable que permanezcan fuera de la habitación donde te encuentras. A medida que avance el tiempo, aumenta estos intervalos de separación entre tú y tu perro mientras realizas diversas actividades en la casa, como ducharte o preparar la cena.
Al implementar estas estrategias de manera constante a lo largo del tiempo, puedes ayudar a fomentar una sensación de comodidad e independencia en tu compañero peludo, incluso cuando no estés físicamente presente a su lado. Una vez que hayas practicado esto durante un período de tiempo, puedes comenzar a entrenar haciendo viajes cortos fuera de casa mientras dejas a tu perro en casa.
Por ejemplo, puedes tirar la basura, recoger el correo en la oficina de correos o cuidar el jardín mientras tu perro permanece en casa en su jaula con un juguete de alimentación lenta. Durante estos viajes, es importante que tu perro no pueda verte ni oírte, ya que esto puede asustarle. Sin embargo, es un paso importante para ayudarle a sentirse más cómodo estando solo.
A medida que avance en el proceso de entrenamiento, puede dar un paso más y realizar recorridos cortos con su automóvil para que su perro se familiarice con el sonido de su automóvil al entrar y salir del estacionamiento. Esto le ayudará a asociar ese sonido con tu partida y reducir poco a poco su ansiedad. Es normal que los perros todavía sientan ansiedad antes de quedarse solos porque reconocen la rutina y anticipan la partida de su dueño.
Para abordar este problema, se recomienda variar su rutina diaria durante la primera fase del entrenamiento. Por ejemplo, si normalmente te duchas por la mañana antes de ir a trabajar o hacer recados, intenta ducharte por la noche. Además, durante estas etapas iniciales de capacitación, considere salir brevemente para guardar los artículos en su automóvil antes de regresar al interior para continuar organizando o preparándose para la salida. Al hacerlo, mantendrá a tu perro adivinando cuándo exactamente te irás.
Recuerda que la paciencia y la constancia son claves durante todo este proceso, ya que el progreso de cada perro puede variar. Con el tiempo y la práctica en el uso de estas técnicas al dejarlos solos, ¡las duraciones gradualmente más largas deberían ser más fáciles tanto para los padres de las mascotas como para los bebés peludos!
Cuanto más inteligente sea un perro, más rápido se aburrirá. Cuando no estás cerca, tu perro puede aburrirse en casa y extrañar la interacción que tiene contigo cuando estás presente. Para abordar este problema, hay varias acciones que puede tomar según lo que resulte más efectivo:
- Antes de ir a trabajar, lleva a tu perro a dar un largo paseo por la mañana para que pueda disfrutar de un tiempo de calidad contigo.
- Juega con tu amigo peludo durante unos 20 a 30 minutos antes de salir de casa. Esto ayudará a cansarlos un poco.
- Deja un juguete interactivo que dispensa comida o golosinas para mantener a tu mascota distraída y entretenida durante tu ausencia.
- Encender un programa de radio o televisión que incluya voces humanas para la compañía del compañero canino (preferiblemente programas de entretenimiento que películas de acción).
Si bien puedes oponerte a la idea de administrar medicamentos a tu perro, vale la pena considerar que pueden servir como una solución temporal para ayudarlo en el entrenamiento. Si, a pesar de tus mejores esfuerzos, tu perro continúa mostrando una ansiedad intensa y un comportamiento destructivo cuando sale de casa, se recomienda encarecidamente buscar consejo de un veterinario sobre suplementos nutricionales o sedantes.
Teniendo en cuenta factores como la edad de tu perro, su historial médico y la gravedad de los síntomas de ansiedad, el veterinario le recetará los suplementos y medicamentos adecuados para abordar el problema en cuestión. Es importante comprender que algunos tratamientos pueden tardar varias semanas antes de que se observe una mejora notable.