Cada minuto son 60 segundos, cada hora son 60 minutos y la duración del tiempo es constante sin importar qué. Sin embargo, lo que diferencia cada minuto y cada hora es la forma en que elegimos usarlos. Por ejemplo, una persona que prioriza regularmente el trabajo sobre la familia puede encontrar que sus relaciones se han dañado gravemente. Hay un tiempo que es propicio para el trabajo y un tiempo que también debemos dedicar a la familia. Debemos aprender a reconocer estos tiempos para mantener el equilibrio de la vida a largo plazo.
Al mismo tiempo, aunque el tiempo no se puede tocar como otros objetos, como el dinero, por ejemplo, todavía se considera un recurso. Sin embargo, debe medirse en calidad, y no necesariamente en cantidad. El tiempo que dediques a cumplir tus ambiciones, aprender nuevas habilidades, mantener tu salud y nutrir tus relaciones será más valioso que el tiempo que dediques a las tareas domésticas o actividades de baja prioridad.
La productividad no depende solo de la cantidad de tiempo que uno tiene disponible. Los períodos de tiempo más largos pueden permitir que se completen más tareas, sin embargo, eso no significa que la calidad del trabajo será alta. Las habilidades, la motivación y la aptitud para el enfoque de uno tienen un impacto en los resultados. Una persona talentosa y decidida puede terminar las tareas rápidamente y con un alto nivel, en comparación con una persona con menos habilidades y poca motivación.
Demasiado tiempo también puede ser un problema. Cuando tenemos un tiempo interminable, nos desmotivamos y nos resulta difícil concentrarnos, y es más probable que retrasemos las tareas. Es fundamental encontrar un equilibrio y utilizar nuestro tiempo sabiamente. De esta manera, se puede lograr todo lo posible en el menor tiempo posible. El marco de tiempo no es lo importante, sino lo que haces con el tiempo disponible.
Todo el mundo necesita aprender a administrar su tiempo, para que, entre otras cosas, puedas equilibrar tu vida personal y profesional. En el horario semanal, debe impulsar tareas, actividades de ocio, comidas, tiempo en familia y más. Si no aprendes a hacerlo bien, no podrás encontrar tiempo para descansar. Esto se debe a que siempre habrá más tareas y cosas por hacer.
Administrar tu tiempo no necesariamente te permitirá completar más tareas en poco tiempo. Si te abrumas con las tareas, encontrarás que siempre se acumulan. No te agotes tratando de aprovechar cada segundo y asegúrate de incluir también tiempo para la relajación en tu agenda. Debes priorizar ciertas tareas sobre otras, y sí, algunas pueden y deben incluso posponerse hasta mañana. Si administras tu tiempo correctamente, descubrirás que tienes todo el tiempo del mundo, incluso para descansar.
Mientras que muchas personas tratan de llenar sus horarios tanto como sea posible para evitar perder el tiempo, otros lo hacen en un intento de "ponerse al día" con los demás y evitar perder oportunidades. Las redes sociales nos presionan mucho para estar ocupados, lo que provoca que muchos dediquen más tiempo al trabajo que a otros aspectos de su vida. Creen que mientras estén ocupados es una señal positiva porque aumenta su ego: siempre están logrando cosas.
Sin embargo, el esfuerzo de estar ocupado por el simple hecho de estar ocupado puede desgastarte con el tiempo, lo que en última instancia perjudicará tu productividad y los resultados que logres. Cuando estás siempre en movimiento y no descansas lo suficiente, pronto sufrirás de agotamiento mental y físico. Esto eventualmente conducirá al colapso. Como sugerimos anteriormente, asegúrate de que tu horario también tenga tiempo para los descansos. Esto te ayudará a mantener un alto nivel de energía durante el trabajo.
Para concluir...
Cuando tienes percepciones erróneas sobre la administración de tu tiempo, puede llevar a que tengas una perspectiva poco realista sobre cómo debes usarlo. Esto puede ser peligroso, ya que puede hacer que fracases en tus intentos de administrar el tiempo. Muchas personas sienten que se supone que deben estar constantemente ocupadas, pero puede ser perjudicial para ellas y es esencialmente un mal uso del tiempo. Ser consciente de estos mitos puede ayudar a asegurarte de no desperdiciar este activo invaluable llamado "tiempo". Marcará la diferencia no solo en el futuro inmediato sino también en el largo plazo.