En el mundo moderno de hoy, es difícil evitar el uso de los numerosos medios tecnológicos que nos rodean: ordenadores, tabletas y teléfonos inteligentes. Estos dispositivos pueden dañar nuestro cuerpo sin que nos demos cuenta debido al uso diario y vigoroso que hacemos de ellos. Así, junto con la gran dependencia que tenemos de estos dispositivos, somos susceptibles de sufrir diversas lesiones físicas que van desde dolores de cabeza y de ojos hasta mareos, pasando por dolores de espalda, cuello y hombros.
Los que padecen dolor de hombros saben lo intolerable que es y lo difícil que resulta sobrellevarlo. Por lo tanto, si sufres de dolor en los omóplatos, o utilizas tanto la tecnología que corres el riesgo de padecerlo, es muy importante que te familiarices con los siguientes ejercicios que aliviarán tu dolor y te ayudarán a evitar que vuelva a aparecer.
1. Liberar los puntos dolorosos entre los omóplatos
Lo primero que tienes que hacer es liberar los puntos dolorosos de los omóplatos y sus alrededores. Con una pelota de tenis, busca el punto blando donde sientes el dolor y ejerce presión sobre él.
2. Estiramiento de los omóplatos
Después de haber masajeado ligeramente la zona de los omóplatos y los puntos de dolor, pasaremos a un estiramiento que trabaja sobre los músculos romboides y deltoides y que te ayudará a reducir el estrés y aliviar la tensión en la zona del hombro.
3. Estirar los músculos trapecios
Si no mantienes la espalda recta durante todo el día, los músculos del trapecio suelen estar tensos y pueden irradiar dolor hacia la zona del hombro. Por lo tanto, este estiramiento es muy importante para corregir el daño de la posición en la que estás la mayor parte del día y para evitar el dolor en la zona del hombro.
4. Postura del niño
Esta postura ayuda a aliviar y liberar los músculos de la espalda, reduciendo así la carga y permitiendo el movimiento libre de los omóplatos.
5. Estiramiento en el marco de la puerta
Este estiramiento ayuda a liberar los músculos pectorales tonificados que pueden afectar a la postura del cuerpo, provocando dolor en los omóplatos. Es muy importante estirar los distintos músculos del pecho para ayudar a mantener la espalda recta y evitar el dolor en la zona de los hombros.
6. Remo con banda de resistencia
Este ejercicio fortalece todos los músculos principales de la espalda, incluidos los que afectan a los omóplatos: los romboides y los trapecios. Al fortalecer estos músculos, puedes mejorar tu postura y flexibilidad.
7. Ejercicio Y y W
Este ejercicio es especialmente bueno después del ejercicio de remo anterior. El ejercicio se centra en los romboides y los músculos trapecios inferiores, que ayudan a estabilizar los omóplatos.