Vender tu casa puede ser una tarea bastante difícil. Aunque supone una oportunidad para mudarse a un nuevo lugar, es importante obtener un beneficio suficiente con la venta. Además, es un trabajo que lleva mucho tiempo y que implica mucha logística: investigar el mercado inmobiliario, conseguir un agente inmobiliario de confianza, encontrar un buen comprador y navegar por el proceso de cierre, entre otras cosas. Todas estas son cosas que debe hacer al vender su propiedad. ¿Y qué hay de las cosas que debe evitar?
Tanto si es la primera vez que vendes como si ya has pasado por este proceso, ser consciente de los errores que no debes cometer marca una gran diferencia. Muchos de estos errores pueden afectar a tus finanzas y, en última instancia, a tu venta. Así que, si alguna vez quieres conseguir el mayor precio posible en un plazo razonable, toma nota de estos errores críticos en la venta de tu casa.
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1. Poner el precio demasiado alto (En Venta)
Fijar el precio de tu casa puede ser complicado. Tu primer instinto puede ser poner un precio basado en el beneficio que te gustaría obtener. Sin embargo, el precio que deseas y el que pagará el mercado pueden ser muy diferentes. Por eso, fijar un precio poco realista para tu casa puede ser contraproducente. Los expertos del mercado afirman que las viviendas con un precio excesivo no suelen venderse. Según una encuesta realizada por la web informativa de venta de viviendas HomeLight.com en 2019, más del 70% de los agentes inmobiliarios consideran que poner un precio excesivo es el error número 1 que cometen los vendedores.
Solo hay que tener en cuenta que un precio correcto permitirá al mercado determinar cuánto vale realmente la vivienda. También crea la posibilidad de que haya múltiples ofertas. Pide ayuda a un buen agente inmobiliario para que realice un análisis comparativo del mercado y comprenda en cuánto se venden las viviendas como la tuya en tu zona. Recuerda que los compradores son mucho más astutos de lo que crees. Por lo tanto, el precio correcto puede generar un interés adicional en tu anuncio y conducir a varias ofertas. Siempre puedes rechazar una oferta demasiado baja.
2. Invertir mucho en renovaciones innecesarias
Muchos propietarios se plantean hacer reformas o mejoras para aumentar el valor de la vivienda. Sin embargo, las renovaciones pueden ser costosas y es poco probable que recuperes el coste en el precio de compra. Además, a muchos compradores de viviendas nuevas les gusta hacer sus propias renovaciones para personalizar el lugar a su gusto. Así que, a menos que tengas que ocuparte de algunas reparaciones inevitables, no tiene mucho sentido invertir dinero en costosas mejoras de la vivienda, como un nuevo tejado, una nueva alfombra, un nuevo suelo, un trabajo de pintura exterior o una nueva entrada.
Los expertos dicen que si te gastas mucho dinero en actualizar el baño o la cocina antes de vender tu casa, debes tener en cuenta que al menos deberías ver una ganancia de mercado dos veces más para justificar ese coste. Si tu objetivo es aumentar el valor de la casa, considera cualquier renovación con mucho cuidado.
3. Vender en el momento equivocado
Lo creas o no, pero sí que hay un momento del año adecuado para vender tu casa. Los agentes inmobiliarios dicen que el mejor momento para vender es la primera mitad del verano (en la mayoría de los lugares). De hecho, se calcula que las casas que se cotizan en esta fase tienden a venderse seis días más rápido que la media anual. Y lo que es más importante, también se venden por más en comparación con la media. Al mismo tiempo, vender durante los meses de invierno o en epocas con demasiadas lluvias o durante las vacaciones, no se considera ideal, ya que suele ser una época del año lenta para la venta de viviendas. Esto se debe a que el frío hace que la gente se quede en casa, y muchos otros están ocupados preparándose para las vacaciones y celebrando. En definitiva, menos personas buscarán una vivienda para comprar durante los meses de frío o lluvias.
4. Descuidar el atractivo de la fachada
Los agentes inmobiliarios creen que los compradores pagarán más por una casa con un gran atractivo exterior. Cuando un comprador potencial llega a tu casa para mostrarla, el exterior es lo primero que llama la atención. Por lo tanto, un exterior poco atractivo puede desanimarles al instante.
Por lo tanto, aunque no haya hecho nada más para preparar tu casa para el mercado, al menos has que el exterior sea atractivo. Algunas de estas tareas de jardinería pueden ser:
* Eliminación de ramas de árboles
* Cortar el césped
* Recorte de arbustos
* Despejar caminos
* Hacer plantaciones sencillas
* Pintar el exterior, pero sólo si es necesario.
Al igual que es importante no pasarse con las mejoras innecesarias, también es vital no ocultar las reparaciones importantes. El comprador moderno es inteligente, y si crees que no se va a dar cuenta de esa gotera en el tejado, la tubería defectuosa, el suelo dañado o el problema de los insectos, te equivocas. Imagínate lo incómodo que sería que un problema importante de tu casa saliera a la luz durante la inspección.
Podría retrasar el cierre o incluso poner fin al acuerdo. Así que, si tienes que hacer alguna reparación importante, ocúpate de ella antes de poner tu casa a la venta, ya que podría convertirse en un gran dolor de cabeza más adelante.
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6. No usar buenas fotos para la venta
Según las estimaciones, casi el 80 por ciento de los compradores buscan casas en Internet, y las fotos del anuncio pueden ser a menudo la primera impresión de tu casa. Por lo tanto, no poner ninguna imagen de su casa en Internet es un gran error. Recuerda que si tus fotos en línea se ven mal, el comprador perderá inmediatamente el interés.
Una mejor opción sería invertir un dinero en contratar a un profesional y conseguir fotos nítidas y limpias con mucha luz natural. Además, sabrán cómo resaltar las mejores características de tu casa que atraerán a los compradores. ¡Te sorprenderá la diferencia que puede suponer una iluminación correcta y un buen objetivo!
7. No limpiar el desorden
Una forma inteligente de preparar la venta es ordenar la casa. Los compradores revisarán todos los rincones de la casa, y encontrar montones de papeles, ropa desparramada, juguetes mal colocados y un baño maloliente puede desanimarlos de inmediato. Si quieres atraer a los compradores, asegúrate de que tu casa no parezca un festival de basura. Por eso, prepara y escenifica tu casa limpiando cada parte del desorden antes de cada muestra. Elimina los olores, limpia los baños, pule o limpia los electrodomésticos y las superfiicies , dobla la ropa y organize tus armarios.
8. No dar importancia a la luz
Las habitaciones luminosas harán que su casa parezca más grande. Por eso, no subestimes el valor de una buena iluminación. Abra las cortinas y deje que la luz natural se cuele por todos los rincones de su casa. Además, llena las lámparas y los accesorios superiores con bombillas de 100 vatios antes de la exposición. Esto creará una sensación cálida, luminosa y acogedora, y puede suponer una gran diferencia a la hora de cerrar el trato.
9. Emocionarte
Para vender con éxito tu casa, es imprescindible no dejar que tus emociones interfieran en tus decisiones. Esto no es fácil, por supuesto, especialmente si se trata de tu primera casa. Habrás invertido mucho tiempo y esfuerzo en adquirirla y tendrás muchos recuerdos en ella. Puede ser duro despedirse de ella, ya que ahora tiene un valor sentimental para ti y tu familia.
Pero ya que estás dando este paso, es hora de que empieces a pensar como un vendedor y no como un simple propietario. Así pues, manten la cabeza fría durante todo el proceso de venta y sea realista. Considera la transacción desde una perspectiva financiera y piensa en cómo el cierre de esta operación te ayudará a mudarse a un nuevo lugar para comenzar un nuevo y emocionante capítulo de tu vida.
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