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El cuerpo humano tiene algunas reacciones extrañas, como los bostezos o el hipo, cuya causa aún desconocemos. Sin embargo, llegó la hora de develar el misterio escondido detrás de estas acciones mediante argumentos científicos que te explicarán el cómo y el por qué. Aquí te presentamos las preguntas que siempre te planteaste y que hoy podrás responder…  Pérdida temporal de la memoria por exceso de alcohol
Si alguna vez te excediste con el consumo de alcohol, es muy probable que no puedas recordar algunos momentos de la noche o el día. Diversos estudios han demostrado que alcohol impide que el cerebro trasfiera información de la memoria a corto plazo a la de largo plazo. El alcohol interfiere con los receptores cerebrales que transmiten glutamato, un compuesto que transporta las señales entre las neuronas. Esto hace que algunas neuronas trabajen y otras bloqueen su funcionamiento, evitando la comunicación entre las diferentes partes del cerebro e impidiendo que recuerdes los eventos que sucedieron durante ese tiempo.
 El apéndice
Durante muchos años, los médicos consideraron al apéndice como un órgano de poca importancia que produce más daños que beneficios. Debido a que la inflamación y ruptura del apéndice ponen al paciente en riesgo de muerte, los médicos solían apendicetomías innecesarias en órganos saludables como medida preventiva. Sin embargo, luego de muchos años de investigaciones, los especialistas descubrieron que la razón por la que conservamos el apéndice es que, en tiempos de enfermedad, dicho órgano provee una especie de refugio para las bacterias buenas que habitan en el sistema digestivo, protegiéndolas mientras el cuerpo combate la infección y devolviéndolas al sistema digestivo una vez saludables.
 Una bola en la garganta
¿Alguna vez sentiste que tenías algo atorado en la garganta cuando sabías que en realidad no había nada? Esta es una reacción común que se produce cuando recibimos malas noticias, cuando estamos al borde del llanto, o cuando atravesamos situaciones de estrés o peligro. Como respuesta a estas situaciones, la persona comienza a respirar de forma agitada, causando la expansión de las cuerdas vocales para permitir el ingreso de aire. Luego, cuando la persona intenta tragar, los músculos de la garganta producen un movimiento que nos hace pensar que tenemos algo atorado.
 Escalofríos
La sensación de escalofríos que sientes en la espalda y que suele estar acompañada por la piel de gallina puede producirse ante diferentes situaciones. Por lo general ocurre cuando experimentamos una situación estresante, ya que en estos casos el cerebro libera grandes cantidades de adrenalina en el sistema, aumentando el estado de alerta y mejorando el tiempo de reacción. Además, la adrenalina hace el cabello se erice y los músculos se contraigan. Esto también puede suceder cuando experimentamos emociones intensas, como el amor o el disfrute al escuchar música o ver una película.
 Piel arrugada por el agua
Probablemente hayas notado que luego de pasar un tiempo largo sumergido en el agua, la piel en los dedos de la mano y los pies comienza a arrugarse. De acuerdo a diversas investigaciones realizadas por especialistas, las personas con dedos arrugados tienen mayor agarre en superficies húmedas. Se creer que este mecanismo ayudó a nuestros ancestros a utilizar herramientas y manejarse de forma exitosa sobre superficies con agua. La necesidad de supervivencia y la evolución hicieron que hoy en día todos los seres humanos contemos con este método de adaptación.
 Cinetosis
Muchos de nosotros podemos sentir náuseas y mareos cuando viajamos en vehículos en movimiento, como autos, barcos o aviones. Esto se produce porque el cuerpo experimenta una sensación diferente a la percepción visual de los ojos. Por ejemplo: si estamos sentados en un barco vemos que el mar está tranquilo, pero el oído interno siente que el barco se está moviendo. De esta forma se produce un desequilibrio entre la percepción visual y la del oído interno, causando náuseas, mareos y vómitos.
 Cosquillas
En algún momento de nuestra vida, todos hemos experimentado la sensación de cosquillas. Aunque puede ser divertido, la mayoría de las personas se sienten incómodas e intentan evitarlo. En los últimos años, una investigadora llamada Christine Harris ofreció una explicación que podría sorprendente. De acuerdo a esta especialista, las cosquillas nos enseñan habilidades de defensa. Christine afirma que, debido a que las cosquillas suelen ser realizadas por amigos o familiares, la persona que las recibe se estremece e intenta escapar de la sensación con rapidez, enseñándole al cuerpo como reaccionar ante un ataque, sin causar daño físico o psicológico.
 Vibración fantasma
¿Alguna vez sentiste que tu teléfono estaba vibrando y al sacarlo del bolsillo viste que no era nada? Esta condición médica es conocida como Síndrome de Vibración Fantasma. En la actualidad, la explicación más acertada para esta reacción asegura que el cuerpo malinterpreta señales del cuerpo debido a pequeños movimientos de la ropa que nos hacen creer que el teléfono está vibrando.
 Bostezo
Tan solo mirar una foto o un video es suficiente para contagiarnos el bostezo. Finalmente, a comienzos de este año surgió una teoría que podría explicar la causa de esta extraña reacción. De acuerdo a esta explicación, al bostezar estamos llevamos aire frio al cerebro, aumentando la circulación de sangre y oxígeno, y disminuyendo el exceso de temperatura. El cerebro aumenta su temperatura ante situaciones estresantes, antes de realizar ejercicio o cuando estamos cansados. Una mejora en la circulación de oxígeno nos ayuda a mantener el estado de alerta.
 Hipo
Todos sabemos lo molesto que es tener hipo, una contracción espasmódica, involuntaria y repetitiva del diafragma. Los científicos creen que el hipo es la evolución de un mecanismo que los infantes utilizan para expulsar aire del estómago y poder amamantarse correctamente. Esta teoría se basa en el hecho de que solo los mamíferos pueden tener hipo.
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