Cinco beneficios para la salud del masaje sueco
1. Incremento del flujo sanguíneo
Usando movimientos largos y golpes de cuerpo y palmadas ligeras, el masaje sueco ayuda a ampliar los vasos sanguíneos y aumenta la velocidad del flujo sanguíneo hacia el corazón. El aumento de la velocidad del flujo sanguíneo ayuda a aumentar el suministro de oxígeno a los músculos del cuerpo y, además, ayuda al proceso de desintoxicación.
2. Rehabilita los músculos dañados
Al usar los movimientos del masaje, se pueden tratar varias lesiones musculares, como la constricción y la adherencia del tejido de la fascia, el tejido que se envuelve alrededor de los músculos. Muchos de los que se someten a este masaje a menudo testifican que esta técnica realmente ayuda a calmar sus músculos, incluso después de un solo tratamiento.
3. Mejora de la flexibilidad del cuerpo
Cuanto más relajados estén tus músculos, mayor será tu rango de movimiento. Cuando combinas el masaje sueco con estiramientos diarios, realmente puedes evitar la posibilidad de lastimarte mientras haces ejercicio. Por lo tanto, si lo haces con frecuencia, es muy recomendable recibir un masaje sueco de vez en cuando.
4. Disminuye el estrés
La relajación creada por el masaje ayuda a liberar no solo los músculos sino también la mente, especialmente cuando tomas los tiempos de masaje más largos, como de una hora a una hora y media. El masaje sueco realizado en un lugar relajado disminuye el nivel de la hormona cortisol en el cuerpo, lo que a su vez disminuye los dolores de cabeza, le da al cuerpo más energía y ayuda a dormir.
5. Fortalece el sistema inmunitario
Continuando con el número 4, uno de los beneficios más significativos de reducir el estrés y los niveles de cortisol en el cuerpo es fortalecer el sistema inmunológico, lo que significa que tu cuerpo es más resistente a las enfermedades después del masaje.
6 técnicas para realizar un masaje sueco completo
El masaje sueco se basa en 6 principios básicos, y aquí está explicado con fotos para mostrarte cómo realizar las técnicas, una tras otra. Dé a cada etapa unos 10-15 minutos para dar la experiencia completa.
1. Masaje suave
Mueve las palmas de las manos suavemente sobre el cuerpo de la persona, desde los 2 lados de la columna vertebral (no directamente sobre ella). Se recomienda hacer esto mientras pones aceite de masaje en el cuerpo de la persona. Asegúrate de que tus movimientos sean lo más largos posible y no ejerzas demasiada presión. Esta es solo la primera parte del masaje, y el objetivo es poner a la persona en un estado de relajación.
Usa toda la mano y los dedos, baja desde los omóplatos hasta la parte inferior de la espalda y vuelve a subir desde los lados. Haz esto hacia los hombros y luego hacia el cuello. Tu peso debe estar sobre tus piernas y no directamente sobre las manos. Puedes continuar esto con las demás partes del cuerpo.
2. Masaje profundo
En esta fase, empujarás y rodarás con la palma de la mano sobre los músculos de la persona con un movimiento de amasado. Deberás ejercer un poco más de presión que antes, pero no demasiado, y mover las manos más lentamente. Puedes usar el inicio de la mano o los dedos, lo que se sienta más cómodo.
Comienza desde la espalda baja y desde allí sube con movimientos de amasado. Una vez que llegues a la parte superior de la espalda, mueve la mano hacia abajo y comienza nuevamente; intenta concentrarte en la misma área de la espalda al menos 3 veces antes de pasar a otra área. Después, puedes repetir el masaje con ambas manos, una encima de la otra, y esta vez con un poco más de presión.
3. Fricción
En esta fase, el objetivo es calentar los tejidos frotando. Para hacer esto, debes frotarte las manos para hacer calor y luego hacer lo mismo en el cuerpo de la persona para calentar sus músculos. Mantén tus dedos pegados entre sí y mueve tus manos en movimientos contrarios en paralelo a lo largo de la espalda, lo que significa que cuando una mano se mueve hacia la parte superior de la espalda, la otra se mueve hacia la espalda baja.
4. Masaje rítmico de golpeteo
Esta técnica es quizás la técnica de masaje sueca más famosa, con el movimiento de golpeteo que ayuda a liberar y relajar los músculos y revitalizarlos. Puedes realizar esta fase de varias maneras: usando solo los dedos mientras apuntan hacia adelante, pegándose y endureciéndose; usando ambos lados de las manos con los dedos ligeramente sueltos; o usando los lados de las manos con ellas pegadas y el dedo anular, el meñique y el dedo medio apuntando hacia adelante.
5. Presionar
En esta fase, presionarás directamente los músculos con los pulgares para penetrarlos profundamente. Deberás hacer esto para cada área del cuerpo hasta que sientas que se vuelve más suave y más cálido.
6. Vibración
Ahora termina el masaje con movimientos rápidos de vibración de las manos que ayudarán a liberar y calentar los músculos. Debes concentrarte en un área a la vez o mover las manos por todo el cuerpo, siempre y cuando la persona se sienta relajada y liberada al final.
Un último consejo adicional: es importante elegir la música adecuada para crear un ambiente relajado y agradable, como en un spa. Si deseas mimar a uno de tus seres queridos, puedes usar la música que hemos agregado a continuación, que es perfecta para un buen masaje relajante.