Nuestros cuerpos son sistemas tan complejos como asombrosos y a pesar que pensemos que no podemos controlarlos, si llegamos a comprender algunos de sus procesos es posible que también podamos controlar otros. A lo largo de este artículo encontrarás algunos datos que te ayudarán en esa tarea de conocimiento de tu cuerpo y de cómo controlar pequeños malestares o dolores sin necesidad de recurrir a pastillas o visitar al doctor.
1. Aliviar jaquecas y migrañas rápidamente
¿Por qué no intentar un aliviar el dolor de manera natural en lugar de recurrir a pastillas? La digitopuntura es una manera efectiva de solucionar este problema y tarda 5 minutos.
Existe un punto de Shiatsu en tu mano que es muy bueno para aliviar dolores de cabeza del lóbulo frontal. Este se encuentra localizado entre tu dedo índice y tu pulgar, sobre el músculo superior, bien cerca de la coyuntura de los huesos. Utilizando tus dedos pulgar e índice, de la mano contraria, presiona fuerte el musculo de los dos lados, localizando el pulgar en el dorso de la mano y el índice del lado de la palma.
Esta técnica además puede ser utilizada para aliviar dolor de hombro, de dientes y dolor de parto.
2. Asegurarte de recordar algo
Si deseas asegurarte de recordar algo, lo mejor que puedes hacer es repasarlo en tu cabeza antes de dormir. Esto es porque la consolidación de la memoria toma lugar mientras duermes. La información importante que se encuentra en la memoria a corto plazo es transferida a la memoria a largo plazo durante este periodo. Por lo tanto, si tienes un examen o una presentación importante, sólo repásala antes de dormir y verás los resultados.
3. Disminuir tu ritmo cardíaco
Si te sientes nervioso o tienes que corres para llegar a algún lugar, tu corazón irá al galope. Para volver tu corazón a un ritmo normal tienes que estimular al nervio vago, que es el que se ocupa de tu ritmo cardiaco. Una manera de hacer esto es exhalando contra una vía cerrada, es decir, hacer el intento eliminar el aire por la nariz mientras mantienes la boca cerrada y la nariz tapada por tus dedos. La presión que esto ejerce en tu cavidad pectoral aumentará, y el nervio vago será estimulado.
4. Detener el sangrado nasal
Esta técnica se basa en el hecho de que la mayoría de los sangrados nasales se originan en la parte delantera del septum, que es la pared de cartílago que divide a la nariz. Para parar el sangrado, debes hacer presión sobre tu encía superior, justo en el punto debajo de la nariz. Puedes utilizar una gaza o algodón para hacer esto.
5. Controlar el mareo producido por el alcohol
Esta no es una excusa para que tomes demasiado alcohol, pero en ocasiones es importante saber cómo hacer para mantener el equilibrio cuando nos vemos afectados por tomar demás.
El órgano encargado del equilibrio de nuestro cuerpo se encuentra en el oído interno y flota en un fluido que tiene la misma densidad que la sangre. El alcohol diluye la sangre, incluyendo la del oído interno, lo que hace que los órganos encargados del equilibrio floten más alto. Esto causa confusión al cerebro y por ende necesita un nuevo estimulo que mejore la percepción del mundo alrededor. La mejor manera de hacer esto es colocando tu mano en un lugar estable. Los nervios sensitivos de la mano darán al cerebro un estímulo táctil que lo hará reevaluar la situación y te proveerán de una nueva imagen del mundo.
6. Tu posición para dormir puede combatir el reflujo ácido
Determinados estudios comprobaron que es menos frecuente que tengas reflujo si duermes sobre tu lado izquierdo. Esto tiene que ver con la posición de tus órganos internos. El esófago y el estómago se conectan a un ángulo y la posición en que duermes determina cual se encontrará más alto de los dos.
Cuando duermes del lado derecho tu estómago estará más alto, lo que puede provocar que el ácido del estómago ingrese en el esófago más fácil. Pero cuando duermes del lado izquierdo tu estomago se encuentra más bajo, por lo que el ácido tendrá que hacer un trayecto contra la gravedad para llegar a las partes superiores del sistema digestivo.
7. No padecer dolor al dar sangre
Si le temes al pinchazo de la aguja, puedes intentar toser. La acción de toser hace disminuir el dolor. La movimiento aumenta la presione en el pecho y el canal espinal e inhibe las señales de trasmisión del dolor a la medula espinal. Debes avisar a la persona que está por pincharte para no complicar su trabajo.
8. Quitar un cosquilleo en la garganta
El cosquilleo dentro de la garganta puede ser muy molesto ya que no es posible llegar al lugar y rascarse. Pero existe un truco para lograrlo de manera indirecta. Simplemente ráscate la oreja en lugar. Cuando estimulas los nervios de tu oreja, causas un reflejo en la garganta que puede hacer un espasmo en los músculos. La contracción muscular ayuda a calmar la picazón de la garganta.
9. Despejar una nariz congestionada
Para hacer esto puedes utilizar un truco osteopático. Tienes que practicar dos movimientos que causarán que el hueso vómer (ubicado en la cara) que se sacuda hacia atrás y adelante, de manera de despejar la congestión. Primero debes empujar tu lengua contra el paladar, luego presiona con un dedo en el punto ubicado entre tus cejas. Haz esto de manera alternada y encontrarás alivio luego de unos 20 segundos.
10. Utiliza agua fría para calmar los nervios
Lavarte la cara con agua fría (lo más fría posible), es una buena manera de calmarte. Es aún más efectivo si además simultáneamente mantienes tu respiración. Esto hace creer a tu cuerpo que estas buceando en agua fría y dispara un antiguo reflejo de los mamíferos. Tu cuerpo va a querer economizar oxígeno cuando sienta que haya escasez del mismo, por lo que el flujo del oxígeno mejorará. Esto te hará tomar inspirar profundamente y relajar el sistema nervioso.
11. Retrasar la urgencia de orinar
Esta sugerencia es particularmente útil cuando tienen la necesidad urgente de orinar y te encuentras muy lejos del primer baño. En lugar de pensar el orinar, debes redirigir tus pensamientos y mantener tu cerebro ocupado con algo más. Los expertos sugieren que te concentres en algo que te excite. Si comienzas a fantasear con sexo, esto ahuyentará las ganas de ir al baño hasta que logres encontrar uno.
12. Hacer que te deje de doler el estómago cuando corres 
En ocasiones cuando estás corriendo puede comenzar a doler el costado de la panza, cuando lo hacemos de manera excesiva. Esta sensación incomoda proviene del hígado, que se encuentra en el lado derecho, debajo de la caja torácica. Al corres las personas suelen seguir un cierto patrón, exhalan cuando su pie derecho llega al piso, y esto baja la presión en el hígado y provoca una puntada cuando sacude el diafragma, el principal órgano de la respiración. Todo lo que debes hacer es prestar atención a tus movimientos y exhalar en el momento en que tu pie izquierdo toca el piso.
13. Tragar pastillas sin esfuerzo
Algunas personas sufren al tener que tragar pastillas y algunas pastillas y suplementos vienen de tamaños muy grandes. Cuando tienes que tomar mucho esto se vuelve un sufrimiento. Algunas personas vuelven la cabeza para atrás a la hora de tomar pastillas, pero lo que debes hacer es realmente lo contrario. Toma un sorbo de agua, vuelve la cabeza hacia adelante y luego traga la pastilla. Deberá ser más sencillo ahora que la pastilla se encuentra flotando en el agua.
14. Extender tu tiempo bajo el agua
Para hacer este truco debes comprender como funciona el cuerpo. La urgencia de respirar no viene de la falta de oxígeno, sino de la acumulación de dióxido de carbono en sangre. Cuando el cuerpo se vuelve más ácido, el cerebro comprende que hay un problema. Tú puedes retrasar esta reacción si hiperventilas justo antes de sumergirte. Esto disminuye la acidez de la sangre y podrá hacer que te quedes por lo menos 10 segundos más bajo el agua. El hecho de hiperventilar hará creer a tu cerebro que tiene más oxigeno del que realmente tiene y te dejará disfrutar unos momentos más sumergido.
Artículo Original: healthyandnaturalworld
