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Chiste: Un Viaje a Roma

El Redactor: Jessica Q. R.

Una joven viaja por primera vez a Roma. Sintiendo la atracción de la grandeza de una hermosa catedral, decidió entrar y admirar las vidrieras de las que tanto había oído hablar. Cuando se acercaba a la entrada, apareció un sacerdote amable pero de aspecto severo.

"Disculpe, señorita", dijo, levantando una mano para detenerla. "Me temo que no puedo dejarla entrar vestida así".

Chiste: Un Viaje a Roma

La joven inclinó la cabeza confundida. "¿Cómo qué?", ​​preguntó. "Mi vestido es modesto".

El sacerdote vaciló, aclarándose la garganta torpemente. "Bueno, no es el vestido en sí, es solo que no lleva sujetador. y no puedo dejarla entrar así".

"¿En serio?", dijo la mujer enojada, "¡Tengo un derecho divino!"

"Y uno izquierdo divino también, señorita", respondió el sacerdote, "pero aún así no puede entrar".

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