El Jardín Botánico de Cluj-Napoca es el más grande de toda Europa y lleva existiendo casi 100 años. Los jardines se establecieron en 1920 y albergan una colección de más de 10.000 especies de plantas diferentes de Rumanía y de todo el mundo, incluidos Japón, Australia y las Islas Canarias. Los jardines están organizados por regiones, lo que permite pasear por un jardín japonés y, a continuación, por un jardín romano, en el que también hay una estatua de la diosa romana de la tierra y el grano: Deméter.
Se trata de la plaza más grande e importante de la ciudad, y también de una de las más grandes de toda Rumanía. A su alrededor hay bastantes lugares y lugares de interés que merece la pena visitar, como la iglesia de San Miguel (que trataremos en la siguiente sección) y una estatua de Matías Hunyadi, uno de los reyes más grandes de Hungría y un importante aliado de Vlad Tepes, el príncipe rumano también conocido como "Drácula". Si eres amante del arte, también puedes entrar en el Museo de Arte de la plaza y ver pinturas del siglo XV, o simplemente admirar el propio edificio de estilo barroco, que fue construido en el siglo XVIII.
Aunque ya se recomendó en el apartado anterior ver este edificio, merece unas palabras más, ya que se trata de una de las iglesias góticas más antiguas de toda Rumanía. La altura de la iglesia es de 70 metros, lo que la convierte en el quinto edificio religioso más alto de Rumanía, y en términos de tamaño, es la segunda iglesia más grande del país, después de la Iglesia Negra de Brașov. La construcción de la Iglesia de San Miguel duró cientos de años, ya que el edificio en sí se fundó entre 1442 y 1447, su torre original se construyó entre 1511 y 1545 y la torre actual se erigió en 1862.
En el centro de la ciudad, en la orilla sur del río Pequeño Someș, puedes pasear por un gran parque que se estableció en el siglo XIX. Aparte del Jardín Botánico, este es el espacio verde más importante de la ciudad, donde se puede ver un antiguo casino restaurado en 2012, un lago, fuentes de agua y estatuas de famosos escritores rumanos. El parque también cuenta con bastantes restaurantes, por lo que puedes pasar una tarde agradable allí y probar la cocina rumana cuando te entre hambre.
Esta enorme mina se abrió al público en 1992, se cerró por reformas que costaron casi 6 millones de euros en 2008 y se reabrió en 2010. En 2017, ya había atraído a más de medio millón de visitantes. Este lugar no solo es una atracción turística popular, sino también un lugar de curación para personas que sufren problemas respiratorios crónicos, gracias a su ambiente salado y húmedo. Cuando entres en él, te sentirás como si hubieras atravesado las puertas de una ciudad subterránea de la que solo has oído hablar en los cuentos de hadas, y te resultará difícil creer que un lugar así exista en realidad.
Este teatro fue fundado en 1792 y es el primer teatro húngaro en toda la región de Transilvania. En 2007, celebró su 215 aniversario y albergó por primera vez el Festival Internacional de Teatro de Interferencias, poco después, en abril de ese año, el teatro se convirtió en miembro de pleno derecho de la Convención Europea de Teatro. Las representaciones son todas en húngaro, pero puedes escuchar traducción simultánea al rumano o al inglés mientras las ves, y vale la pena señalar que el edificio también es sede de la Ópera Húngara de Cluj-Napoca, por lo que también puedes ver representaciones de ballet y ópera allí.
Este antiguo pueblo es una atracción turística visitada por decenas de miles de turistas cada año, donde puedes ver cómo era la vida tradicional y rural en la región de Transilvania antes de la llegada de la modernidad, que finalmente la erradicó. Se recomienda reservar un día entero para visitar este parque, donde encontrarás 13 residencias y más de 90 edificios que alguna vez fueron típicos de varias áreas de Transilvania.
Esta sinagoga también es conocida como el "Templo de los Moșnați", en referencia a los judíos del norte de Transilvania, que fueron exiliados y perecieron en el Holocausto. El lugar servía a los judíos Neolog que vivían en la ciudad y fue construido a finales del siglo XIX. Aunque sufrió graves daños en 1927 debido a un ataque de los operativos legionarios, el gobierno rumano ayudó a restaurarlo. El edificio volvió a sufrir daños durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial y fue renovado nuevamente en 1951.
Puedes guardar este lugar para el final de tu viaje, ya que es la zona perfecta para concluir tu visita a Cluj-Napoca. Puedes subir esta colina entre las ruinas de una fortaleza y, una vez que hayas terminado, puedes dejar que tus ojos disfruten de la vista de toda la ciudad y ver la puesta de sol sobre ella. Para llegar allí, debes estar preparado para subir un largo tramo de escaleras, pero vale la pena.
Fuente de las imágenes: Bogdan Pop
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2, Ana Maria Catalina
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