La mayoría de nosotros ya comprendemos la importancia de mantener una dieta saludable para nosotros mismos, pero es igualmente crucial cuidar la alimentación que le damos a nuestros pequeños, que recién comienzan a explorar el mundo de la comida. Aunque los bebés aún no pueden comer alimentos sólidos y dependen principalmente de la leche, es fundamental asegurarnos de que sus alimentos en puré contengan todos los nutrientes necesarios. Para conseguirlo, combinar frutas y verduras es la mejor opción.
Hemos reunido ocho excelentes combinaciones y te ofrecemos recetas para crear purés personalizados para tu bebé. Estas combinaciones no solo pondrán una sonrisa en la cara de tu pequeño, sino que también contribuirán significativamente a su salud en general.
Las zanahorias son un excelente alimento para los bebés, ya que tienen un sabor dulce y juegan un papel vital en el fortalecimiento del sistema inmunológico, que aún se encuentra en desarrollo y requiere un cuidado adecuado. También son ricos en vitamina A, zeaxantina y luteína, que mejoran la salud ocular y promueven una visión normal.
Para preparar un puré, cocina al vapor 60 gramos de zanahorias peladas y picadas y 100 gramos de calabaza pelada y cortada en cubitos durante unos 8 minutos hasta que se ablanden. Luego, tritura la mezcla hasta obtener un puré con una cucharada de aceite vegetal y un poco de leche, si es necesario.
La coliflor es una verdura nutritiva que es excelente tanto para niños como para adultos. Contiene sustancias importantes como ácido fólico, calcio y vitaminas A y C, que son esenciales para un correcto desarrollo. Cuando se combina con camote, que es una gran fuente de varias vitaminas, su bebé puede recibir una gran cantidad de beneficios para la salud de un simple puré.
Para hacer el puré, cocina al vapor batata pelada y cortada en cubitos con floretes de coliflor durante 8 minutos hasta que todo se ablande. Después de enfriar la mezcla, licúala con una cucharada de aceite vegetal y un poco de leche para espesar el puré.
Anteriormente hemos mencionado las ventajas de incluir zanahorias en la dieta de tu bebé. Un puré hecho con puerros, manzanas rojas y zanahorias puede ser muy beneficioso para los bebés, especialmente para promover un sistema digestivo saludable. Los puerros son ricos en fibra dietética, lo que puede mejorar en gran medida la digestión y la salud intestinal en los niños. Las papas también tienen un alto contenido de azúcares alcalinos que ayudan a reducir los niveles de acidez en el cuerpo.
Mezclar estos vegetales con zanahorias puede ayudar a cultivar una comunidad de bacterias amigables en el intestino de su hijo, lo cual es crucial para su crecimiento y desarrollo.
Para hacer el puré, se empieza cortando en pequeños círculos una raíz de puerro de 8 cm de largo y se fríen en una olla con un poco de aceite. Una vez cocidos los puerros, añade a la olla 100 gramos de zanahorias peladas y troceadas y 100 mililitros de agua. Cubre la olla con una tapa y cocina a fuego lento hasta que las zanahorias estén blandas. Mientras se cocinan las zanahorias, hierve 120 gramos de papas en otra olla hasta que estén blandas.
Tritura las papas en un tazón limpio. Una vez que las zanahorias y los puerros estén blandos, tritúralos hasta obtener un puré con una batidora. Mezcla el puré con el puré de papa y añade un poco de leche de tu bebé para ajustar la textura a su paladar.
Si estás buscando aumentar la fuerza y la salud general de tu hijo, considera presentarles una combinación de calabacín, espinacas y pasta de tomate desde una edad temprana. Se sabe que la espinaca es una rica fuente de hierro, potasio y calcio, que son esenciales para desarrollar huesos y músculos fuertes, especialmente en los niños pequeños.
El calabacín aumenta su valor nutricional con su alto contenido de calcio, magnesio y fosfato. Y la pasta de tomate proporciona una dosis de vitamina C, que ayuda al cuerpo a absorber el hierro de las espinacas y los calabacines.
Para preparar este puré, simplemente calienta un poco de aceite, fríe los calabacines cortados en cubitos hasta que estén suaves, agrega las hojas de espinaca y cocina por unos minutos hasta que se ablanden. Mezcla todo lo anterior con la salsa de tomate y agrega un poco de papilla de arroz si es necesario.
La combinación de brócoli, chícharos y papas es una excelente fuente de nutrición para su bebé. El brócoli y los chícharos son esenciales para desarrollar el sistema inmunológico de tu hijo, mientras que las papas ayudan en la digestión y previenen el estreñimiento. Las papas también ayudan a desarrollar buenas bacterias en el intestino.
Para hacer un puré, hierve las papas cortadas en cubitos hasta que estén blandas y cocina al vapor el brócoli y los chícharos por separado. Tritura las papas con aceite vegetal, haz un puré con los chícharos al vapor y el brócoli, luego mezcla todo junto. Si es necesario, agrega leche para darle consistencia.
Pasando a las ciruelas pasas y las manzanas, son una gran fuente de vitaminas y minerales para el crecimiento y desarrollo de su bebé. Puedes hacerlos puré juntos o por separado, y servirlas como refrigerio o como parte de una comida.
En el apartado de frutas, la manzana es una fruta popular entre los bebés por su alto valor nutritivo y su fácil digestibilidad. Cuando se combina con ciruela pasa, no solo sabe muy bien, sino que también beneficia al sistema digestivo del bebé.
Para hacer el puré, cocina una manzana pelada, sin corazón y picada gruesa con dos ciruelas pasas medianas en 120 mililitros de agua hasta que estén completamente blandas. Luego mezcla el contenido hasta que se convierta en puré.
7. Pera y durazno
Un puré elaborado con la deliciosa combinación de durazno y pera no solo puede ser un placer para tu pequeño, sino que también ofrece varios beneficios para la salud. Estas dos frutas son ricas en nutrientes esenciales que promueven un sistema digestivo e inmunológico saludable. El durazno es conocido por su capacidad para curar inflamaciones de la piel y trastornos respiratorios, mientras que la pera ayuda a curar heridas y cortes más rápido.
Para hacer este puré, cocina 100 gramos de duraznos secos en 250 mililitros de agua hasta que estén blandos. Al mismo tiempo, cocine al vapor 2 peras peladas, sin hueso y picadas durante 5 a 6 minutos. Licúa los componentes junto con sus jugos de cocción para formar un puré suave.
8. Plátano y aguacate
¿Sabías que el aguacate es en realidad una fruta? Cuando se combina con plátano maduro, la textura suave de ambos facilita la creación de un puré. Esta deliciosa combinación no solo hace que la preparación de comidas sea rápida y fácil, sino que también brinda muchos beneficios nutricionales para tu hijo. Ayuda a fortalecer la actividad cerebral, suministra vitaminas y fibra al cuerpo, y más.
Para hacer el puré, simplemente tritura ¼ de aguacate maduro y ¼ de plátano maduro hasta que quede suave. ¡Sirve inmediatamente a su pequeño como un refrigerio saludable!