No hay persona a la que no le guste aprender trucos y atajos relacionados con la cocina, pero varios métodos a veces fallan y, en consecuencia, se tiran a la basura costosas materias primas. Además, hay personas que gastan cientos de dólares en utensilios de cocina que en realidad no son necesarios para cocinar como profesionales. Para evitar estas situaciones y poder cocinar y hornear como verdaderos profesionales, deberías leer el siguiente artículo que enriquecerá tus conocimientos y te dará 10 consejos importantes para trabajar en la cocina; desde las herramientas básicas que debes tener hasta los mejores métodos de horneado y mucho más.
1. 6 herramientas que deberían estar en toda cocina
Hay innumerables artilugios que sirven para diferentes cosas en la cocina, algunos son más útiles y otros un poco menos, pero la conclusión es que se puede prescindir de la mayoría de ellos. Si preguntas a los cocineros profesionales, te dirán que sólo hay seis utensilios básicos sin los cuales es difícil desenvolverse en la cocina. Si crees que incluyen los utensilios más comunes: espátula, cazo, batidora, etc., ¡te equivocas! Los 6 utensilios no son otros que un cuchillo de cocinero, una olla, una tabla de cortar, una sartén, un pelador y una cuchara de madera.
2. Un simple utensilio que te permitirá saber que tu pollo está listo
¿Cuántas veces has cocinado o asado un pollo y al servirlo has descubierto que estaba poco hecho, seco o demasiado hecho? Si te ha pasado más de una vez, debes saber que para conseguir el resultado perfecto sólo necesitas un termómetro, analógico o digital, y saber la temperatura que debes alcanzar para cada pieza.
Temperatura recomendada para el pollo asado o cocido:
3. Otras cuatro formas de utilizar un pelado
Muchos de nosotros utilizamos el pelador sólo para pelar verduras como zanahorias, patatas, etc. Pero después de conocer qué otras cosas puedes hacer con esta herramienta no entenderás cómo no se te había ocurrido antes.
1. Decoraciones finas de verduras - Si siempre has querido hacer películas finas de verduras para decorar tu comida pero no era lo suficientemente hábil para cortarlas por ti mismo con un cuchillo, puedes hacerlo con el pelador y utilizando sólo una esquina de la hoja. Para cortar películas más anchas, corta utilizando toda la longitud del pelador.
2. Láminas anchas de queso - Adorna o cubre tu ensalada o pasta con láminas anchas de queso duro, como el parmesano, utilizando el pelador.
3. Tiras de cítricos - Si quieres añadir un toque cítrico a tu bebida, o preparar largas tiras de limón o naranja, pela un cítrico con el pelador según el grosor que desees. Con el pelador o el rallador se obtienen tiras muy pequeñas en comparación con este método.
4. Rizos de chocolate - Decora tu tarta como un profesional con rizos de chocolate que son sabrosos e impresionantes. Todo lo que tienes que hacer es colocar el chocolate y el pelador (el proceso de pelado calienta la cuchilla y hace que el chocolate se derrita) en el congelador durante 30 minutos o más, e inmediatamente pela los rizos a lo largo del ancho de la barra de chocolate para crear decoraciones espectaculares.
4. Un Tourne - cuchillo pequeño para un gran rendimiento
Un cuchillo de cocinero o un cuchillo para cortar verduras son estupendos para diversas actividades en la cocina, pero el Tourne con forma de pico es uno de los mejores regalos que puede recibir cualquier aficionado a la cocina y a los fogones. ¿Qué se puede hacer con él? Casi todo: desde quitar las semillas de los pimientos de forma precisa y delicada, cortar peces pequeños, quitar los tallos de las fresas e incluso tallar verduras para decorar. La longitud de la hoja oscila entre los 2-3 cm y se puede encontrar en tiendas especializadas y, a veces, en tiendas de menaje.
5. Otro uso del papel de horno
Si has estado utilizando papel de aluminio para hornear pescado o cocinar verduras al vapor en el horno, pero has dejado de hacerlo porque te han dicho que utilizar papel de aluminio no es saludable, debería conocer el siguiente método barato y saludable. Coloca el papel de horno en la bandeja deseada, coloca las verduras, el pescado o el pollo en el centro del papel y, a continuación, desplaza las dos esquinas del papel hacia las opuestas, de modo que en realidad está doblando el papel por la mitad y creando un bolsillo. Dobla los bordes varias veces alrededor, mete en el horno, cocina según las instrucciones de la receta y ya tienes una solución cómoda.
6. Cuatro consejos para hacer la mejor masa de hojaldre
Probablemente has escuchado cientos de consejos para hacer la masa perfecta, y en su mayor parte, ha funcionado bien, pero a veces un poco menos. Con los siguientes consejos, podrás conseguir una masa al nivel de los mejores pasteleros.
A. Manten todos los productos refrigerados: esta regla se aplica no sólo durante el verano, sino durante todo el año. Haciendo esto te asegurarás de que la grasa que utilices no se derrita provocando que la masa resultante sea demasiado grasienta e inestable.
B. Nunca extiendas la masa fría - Después de hacer la masa, extiéndela hasta formar una bola lisa y ligeramente plana y enfríela. Antes de utilizarla, saca la masa del frigorífico durante unos 15 minutos y luego empieza a aplanarla sobre una superficie ligeramente enharinada. Si dejas que la bola de masa se caliente, te asegurarás de que tu masa enrollada no tenga grietas ni roturas.
C. Controla la cantidad de harina que utilizas: la cantidad correcta de harina es clave para el éxito de la receta, pero también debes tener en cuenta la harina que utilizas al extender la masa. Por ejemplo, cubrir la superficie de trabajo con demasiada harina hace que la masa la absorba y cambie la proporción de los ingredientes de la receta, lo que puede hacer que se agriete o que la masa se quede seca y demasiado dura. Por otro lado, usar muy poca harina puede hacer que la masa se rompa, se pegue a la superficie de trabajo y al rodillo, e incluso se caiga por los bordes del molde.
D. Saber dónde colocar un molde para tartas - Mientras que la mayoría de los pasteles se recomiendan para ser horneados en el medio del horno, la masa para tartas debe ser horneada en el tercio inferior del horno para asegurar que la masa en la parte inferior del horno esté suficientemente cocida y no quede blanca, mientras el relleno se solidifica.
7. Enrolla la masa lejos del cuerpo
Siguiendo el consejo anterior sobre el horneado, hay un consejo para amasar que sirve para la mayoría de las masas, y es muy recomendable que lo conozcas. Para conseguir un grosor uniforme sin estirar demasiado la masa, debes seguir el patrón de las 10:00, 12:00 y 2:00. ¿Qué significa esto? Pasar el rodillo de la masa sobre una superficie ligeramente enharinada desde el centro hacia la dirección de las 10, luego hacia las 12 y finalmente hacia las 2, igual que un reloj analógico. Levanta la masa ligeramente y gírala un cuarto de vuelta sobre la superficie de trabajo, vuelve a enharinar ligeramente si es necesario, y repite el enrollado una y otra vez hasta que el último cuarto de la masa sea tu punto de partida una vez más.
8. Tipos de sales y su uso
Hay muchos tipos de sales, pero las más conocidas y utilizadas en la cocina son sobre todo la sal gruesa y la sal de mesa. La sal gruesa o sal marina suele utilizarse para encurtir, decorar pasteles salados y preparar carnes, y tarda en disolverse en los alimentos. No suele contener yodo, y la salinidad de una cucharadita de sal gruesa es menor que la de la misma cantidad de sal de mesa. La sal de mesa, en cambio, se disuelve en la cocción y en el líquido más rápidamente, y es mucho más fácil condimentar los alimentos con ella.
9. Cómo hacer fácilmente una salsa holandesa
La salsa Holandesa es una de las salsas blancas más famosas del mundo. A muchos les da miedo prepararla porque en muchos casos se "rompe" y las yemas se convierten en huevos revueltos. Para hacer la salsa perfecta con facilidad, hay que calentar la mantequilla y retirar la espuma creada con una cuchara o un colador. Una vez que la mantequilla esté refinada y no quede espuma, pon una olla con agua a hervir y coloca un recipiente sobre ella (al baño María). Colocar las yemas de huevo en el bol y mezclar con un batidor. De vez en cuando, levanta el bol del agua hirviendo para que la temperatura no sea demasiado alta y los huevos se conviertan en una tortilla. Vierte la mantequilla sin dejar de remover y llevarla a una temperatura de unos 45 grados, removiendo constantemente. Luego retira del fuego, añade un poco de sal, pimienta de cayena y un poco de zumo de limón, y vuelve a remover y a servir.
10. Hacer huevos duros en el horno
