El reino animal está repleto de individuos que tienen algunos de los superpoderes más fenomenales de la vida real. Desde la súper vista hasta el súper oído, desde la capacidad de volverse invisible hasta imitar cualquier sonido del mundo; algunos miembros del mundo natural poseen dones realmente únicos y extraordinarios que los humanos sólo pueden envidiar. A continuación, echamos un vistazo a 7 increíbles animales con algunos superpoderes realmente excepcionales que sin duda nos encantaría tener.
1. Un halcón peregrino ve a su presa mientras se mueve a la velocidad de un coche de Fórmula 1
El halcón peregrino (Falco peregrinus) no sólo es increíblemente rápido -se han registrado velocidades de hasta 389,4 km/h-, sino que también tiene la visión más rápida del reino animal. Según un estudio publicado en el Journal of Experimental Biology, estas magníficas aves poseen la visión más rápida, registrando 129 Hz (parpadeos por segundo) siempre que la intensidad de la luz sea alta. El estudio señala que el halcón sacre puede ver a 102 Hz y el halcón de Harris a 77 Hz en las mismas condiciones. En comparación, los humanos ven hasta un máximo de 50 a 60 parpadeos por segundo.
Los investigadores añadieron también que la velocidad a la que las distintas aves de presa procesan las impresiones visuales se corresponde con sus necesidades de caza. El halcón peregrino, por ejemplo, caza aves de vuelo rápido. La capacidad de este pájaro para detectar movimientos ultrarrápidos le permite detectar a su presa con bastante antelación. Tienen una visión extremadamente aguda y la capacidad de procesar rápidamente diferentes impresiones visuales. Así, cuando se abalanza sobre su presa, la velocidad del halcón peregrino puede alcanzar fácilmente más de 350 km/h, casi similar a la de un coche de carreras de Fórmula 1.
2. Los renos tienen una supervista
Los renos (Rangifer tarandus) que viven en el Círculo Polar Ártico se enfrentan a un entorno muy duro. Estos hermosos animales tienen una forma excepcional de lidiar con la oscuridad casi total durante el invierno extremo que puede durar 2 meses en esa región. Tienen un mecanismo evolucionado que aumenta su sensibilidad a la limitada luz ambiental. En otras palabras, tienen el don de modificar su visión en diferentes condiciones de luz.
Los investigadores han descubierto también que una parte del ojo del reno, llamada tapetum lucidum (u "ojo de gato"), cambia de color durante los meses de invierno. Esto aumenta aún más su capacidad de utilizar la luz durante los días oscuros. Esto no es todo. Estas míticas criaturas pueden ampliar su rango visual hasta el ultravioleta (UV). Esto les permite aprovechar de forma óptima la luz invernal rica en rayos UV y también les ayuda a detectar mucho mejor la comida y los depredadores. Así, los renos captan la luz que los humanos no podemos ver en esos profundos meses de invierno.
3. Las sepias pueden volverse casi invisibles
A quién no le gustaría tener la capacidad de ser invisible, ¿verdad? La invisibilidad nos ha fascinado a todos desde siempre. Pero mientras los humanos no están ni cerca de encontrar formas de volverse invisibles, hay una criatura marina poco conocida que posee algunas de las mejores habilidades de camuflaje del reino animal. La sepia (Sepia Officinalis) es un organismo único. Cuando un depredador está cerca, este animal marino utiliza el camuflaje de forma extraordinaria: altera la textura física de su piel para asemejarse a la tosquedad de las rocas, el coral o las algas circundantes.
Y eso no es todo. Cuando la sepia retiene la respiración, la falta de agua que fluye por sus branquias reduce la actividad eléctrica en ellas y la hace casi invisible para los depredadores. La piel de la sepia está cubierta de diminutos órganos musculares conocidos como "cromatóforos" que pueden cambiar de color como reacción a una señal del cerebro. También tiene otro conjunto de órganos musculares llamados "papilas" que pueden modificar la estructura de la piel cuando se estimulan. Los científicos estudiaron este don único de las criaturas y descubrieron que cuando se congelaban, ya fuera de forma accidental o intencionada, cubrían la cavidad que lleva a las branquias con sus tentáculos. En el momento en que lo hacían, la tensión del agua cercana bajaba hasta casi el 80%.
4. Los abejorros tienen un 'sexto sentido'
El diminuto pero hermoso abejorro (Bombus) adquiere una carga eléctrica positiva mientras vuela por el aire. Las flores del suelo, por su parte, tienen una carga negativa. Cuando ambas se encuentran, el abejorro detecta de alguna manera la diferencia. Se ha revelado que cuando una abeja visita una flor para recoger su polen, tiende a transferir parte de sus cargas positivas a la planta, alterando así su carga eléctrica. Curiosamente, esta carga es percibida por las demás abejas que llegan, que entienden que alguna otra abeja ha utilizado recientemente su polen y, por tanto, se alejan de esa flor en particular hacia otras. Además, los abejorros pueden detectar y diferenciar los campos eléctricos de las distintas flores.
"La coevolución entre las flores y las abejas tiene una larga y beneficiosa historia, así que quizá no sea del todo sorprendente que todavía hoy estemos descubriendo lo notablemente sofisticada que es su comunicación", afirma Daniel Robert, autor principal del estudio que investiga esta capacidad.
Las hienas son uno de los carroñeros más conocidos del reino animal. Tienen unas mandíbulas extremadamente fuertes que pueden aplastar los huesos más gruesos. De hecho, su fuerza de mordida es incluso más potente que la de los leones y los tigres.
Pero esa no es la capacidad más impresionante de este animal. Las hienas también tienen un sistema digestivo muy potente -uno de los más fuertes del mundo animal- compuesto por fluidos altamente ácidos. Pueden comer y digerir toda su presa, incluyendo dientes, cuernos, pezuñas e incluso huesos. Imagina tener el poder de digerir cualquier cosa que comas sin preocuparte de enfermar. ¿No sería genial?
Las hienas buscan comida y comen muchos cadáveres. Por lo tanto, necesitan un sistema digestivo fuerte para hacer frente a todas las bacterias. Gracias a su sistema digestivo excepcionalmente potente, las hienas sobreviven en la naturaleza y son uno de los carroñeros más fuertes del mundo.
6. Los pepinos de mar pueden regenerar sus órganos
Los pepinos de mar (Holothuroidea) son criaturas especiales que pueden regenerar partes del cuerpo dañadas o perdidas. Aunque hay algunos otros animales que también poseen increíbles habilidades regenerativas, los pepinos de mar pueden hacerlo con mucha mayor magnitud. Resulta fascinante que los tejidos regenerativos del pepino de mar se formen tanto en la región anterior como en la posterior y se extiendan hacia los extremos opuestos. Finalmente, estos tejidos se fusionan para formar un tracto digestivo completamente nuevo.
Esta regeneración forma parte del mecanismo de defensa de la criatura. Cuando se siente amenazado, el pepino de mar puede mutilar su cuerpo contrayendo ferozmente sus músculos y desechando muchos de sus órganos internos por el ano. Sorprendentemente, pueden regenerar esas partes del cuerpo y reanudar su vida despreocupadamente. Se trata de un superpoder bastante sorprendente, ¿no es así?
Los científicos están estudiando ahora este notable poder y puede resultar un modelo vital para la medicina regenerativa para los humanos en breve.
7. El increíble pájaro lira puede imitar cualquier sonido del mundo
El ave lira (Menura novaehollandiae) es una fuerza de la naturaleza increíblemente genial. Originarias de Australia, estas hermosas aves se distinguen por su fastuoso plumaje en forma de lira. Sin embargo, su aspecto no es la característica más especial del ave. Las liras tienen la capacidad más inusual de imitar prácticamente cualquier sonido del mundo. No sólo imitan a otros pájaros, sino también sierras mecánicas, láseres, alarmas de coches, el ladrido de un perro, las uñas golpeadas y el clic de un obturador de cámara. De hecho, no hay límite a los sonidos que puede repetir esta ave. Son criaturas verdaderamente excepcionales del mundo natural.
Este pájaro tiene una inusual siringe (la caja de voz de un pájaro) que tiene tres pares de músculos siríngeos en lugar de los cuatro que suele haber en la mayoría de las aves. Los científicos no están seguros de si esto ayuda al ave lira a imitar sonidos, pero han observado que el ave tiene el equivalente sonoro de una memoria fotográfica.
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