El invierno puede ser problemático para tu piel, especialmente para la piel de tus pies. De hecho, los pies agrietados son un problema invernal que sufren muchas personas. Esta dolencia se caracteriza por una piel seca, dura y engrosada alrededor del borde del talón.
Aunque los pies agrietados pueden afectar a cualquier persona, tienden a ser más comunes entre las personas de edad avanzada, o aquellos que sufren de eccema o diabetes.
La piel de nuestros pies está mayormente seca porque no hay glándulas sebáceas presentes en esa área del cuerpo. Sin embargo, la sobreexposición al clima frío, la falta de hidratación, la baja humedad, ciertas condiciones médicas y la posición prolongada pueden provocar pies secos y agrietados.
Mantener los pies libres de grietas este invierno es más fácil de lo que piensas. Con solo un poco de cuidado, puedes asegurarte de que tus pies permanecerán suaves y lisos. Aquí hay 10 excelentes maneras de mantener tus pies saludables este invierno:
Un baño de agua tibia una vez por semana mantendrá tus pies libres de grietas durante todo el año, y especialmente en invierno. Al remojar tus pies, haces que sea más fácil eliminar la piel dura que se acumula en los pies y los talones con el tiempo.
Método
1. Agrega un poco de jabón líquido a una bañera llena de agua tibia.
2. Agrega un puñado de sal marina.
3. Remoja tus pies en esta solución durante aproximadamente 20 minutos.
4. Después de remojarlos, usa una piedra pómez para limpiar suavemente las células muertas sueltas de la piel.
5. Enjuaga tus pies con agua limpia y seca con una toalla suave.
6. Aplica un poco de crema para los pies y ponte un par de medias limpias.
7. Usa este remedio una vez por semana.
2. Masaje con aceite
Si desarrollas regularmente pies secos y agrietados, es muy importante que los masajees regularmente con un poco de aceite. El aceite mantendrá la piel dura hidratada y mejorará la circulación sanguínea. Para el masaje, puedes usar aceite de masaje solo o mezclarlo con otros aceites para obtener beneficios adicionales.
Método
1. Por la noche antes de acostarte, lávate los pies con agua tibia.
2. Seca bien, especialmente entre los dedos de los pies.
3. Masajea los pies y los talones con aceite de oliva, coco o almendras, o una mezcla de estos, durante 10-15 minutos.
4. Ponte unos calcetines limpios y ve a la cama.
5. Continúa haciendo esto durante los meses de invierno.
3. Exfoliante de azúcar morena
Los pequeños gránulos de azúcar morena funcionan como un excelente exfoliante para tus pies. Ayuda a eliminar las células muertas de la piel para que la piel de los pies permanezca suave y saludable. Además, la azúcar morena contiene ácido glicólico que puede ayudar a combatir cualquier infección bacteriana.
Método
1. Mezcla 2 cucharadas de azúcar morena, 1 cucharada de miel, 1 cucharada de aceite de oliva y 1/2 cucharadita de jugo de limón para formar una pasta espesa.
2. Después de haber remojado los pies en agua tibia durante 10 minutos, aplica esta pasta en los pies.
3. Frota la pasta con movimientos circulares hasta que los gránulos de azúcar se hayan derretido.
4. Lávate los pies con agua tibia.
5. Repite una vez a la semana.
El aceite de ricino suavizará e hidratará tus pies: penetra profundamente en la piel y, por lo tanto, ayuda a restaurar la humedad y agrega suavidad a la piel.
Método
1. Aplica una capa gruesa de aceite de ricino en los pies y los talones agrietados.
2. Ponte unos calcetines y déjalos toda la noche.
3. A la mañana siguiente, enjuaga con agua tibia.
4. Haz esto a diario.
5. Glicerina
La glicerina que tienes en tu gabinete puede hacer maravillas para mantener tus pies libres de grietas y suaves durante los duros meses de invierno.
Método
1. Mezcla cantidades iguales de glicerina y agua de rosas.
2. Frota esta solución en tus talones y pies antes de acostarte por la noche.
3. Ponte unos calcetines y deja la solución durante la noche.
4. A la mañana siguiente, enjuaga tus pies con agua tibia.
5. Haz esto todos los días durante el invierno.
6. Cera de parafina
Si ya tienes talones agrietados y doloridos, entonces la cera de parafina es justo lo que buscas. Esta cera actúa como un emoliente natural para suavizar tu piel. Además, el calor de la cera abre los poros de la piel y mejora la circulación.
Método
1. Derrite un bloque de cera de parafina en una caldera doble.
2. Agrega dos cucharadas de aceite de mostaza o de coco a la cera derretida y mezcla bien.
3. Deja que la mezcla se enfríe (hasta que se forme una capa delgada en la parte superior).
4. Sumerge tus pies en la mezcla, espera de 5 a 10 segundos y vuelve a sumergirlos. Repite esto de cinco a seis veces.
5. Cubre tus pies con una envoltura de plástico durante 30 minutos. Puedes ponerte un par de calcetines si lo deseas.
6. Retira el plástico y retira la cera de tu piel.
7. Repite este tratamiento una o dos veces por semana.
La ingesta de agua es importante para mantener el metabolismo celular saludable. Un cuerpo deshidratado puede conducir a la piel seca y no puede reparar el daño existente en la piel. Si tu piel no recibe suficiente agua, se volverá tensa y menos resistente, lo que significa que tus pies serán más propensos a las grietas y fisuras.
• Bebe mucha agua durante todo el día. Una buena regla general es beber suficiente agua para que tu orina tenga poco o ningún color.
• Junto con el agua, agrega frutas y verduras ricas en agua a tu dieta.
8. Paquetes de frutas
Puedes prevenir y tratar los pies agrietados con paquetes de frutas caseras. Por ejemplo, las bananas maduras, los aguacates y las papayas se consideran remedios caseros efectivos para los talones agrietados y secos gracias a sus propiedades hidratantes.
Método
1. Aplica la pulpa de un plátano maduro o aguacate en las partes agrietadas de tus talones y pies.
2. Deja reposar durante 10 minutos, luego lavar con agua tibia.
3. Haz esto varias veces a la semana para disfrutar de una piel suave y tersa.
9. Vitamina E
La vitamina E es un poderoso antioxidante que protege las células de la piel de los radicales libres dañinos producidos por el cuerpo y otras fuentes ambientales. Esta vitamina ayuda a reparar la piel y hace maravillas al tratar y prevenir los pies agrietados.
• Frota aceite puro de vitamina E en tus pies cada noche antes de acostarte.
• Incluye alimentos ricos en vitamina E en tu dieta: vegetales verdes, nueces, cereales fortificados y productos integrales.
10. Vitamina C
Al igual que la vitamina E, la vitamina C protege la piel de los radicales libres. Esta vitamina soluble en agua también es crucial en la producción de colágeno, que se requiere para una piel sana.
• Come alimentos ricos en vitamina C, incluyendo frutas cítricas, como naranjas y toronjas, fresas, tomates, coliflor, pimientos rojos y piña.
• Además de esto, incluye Omega-3 y alimentos ricos en zinc en tu dieta. Algunas fuentes excelentes de estos nutrientes incluyen pescado graso, ostras, semillas de lino, nueces y cereales fortificados.
• También puedes tomar un suplemento (consulta primero a tu médico).
Consejos Adicionales
• Dado que los pies sanos comienzan con una buena higiene, asegúrate de mantenerlos limpios y secos todo el tiempo.
• No uses productos que contengan alcohol, ya que secarán aún más la piel.
• Evita usar agua caliente para bañarte, ya que elimina los aceites de la piel.
• Siempre usa zapatos que te queden bien para permitir que tus pies respiren.
• Evita la pérdida de calor de tus pies usando calcetines de buena calidad.
Además de cuidar de tus pies también es importante que cuides tus manos y en nuestro siguiente enlace te decimos cómo hacerlo solo haz clic aquí.
Fuente: top10homeremedies